La inseguridad es un riesgo que afecta al crecimiento económico potencial, y muy posiblemente que sus efectos sobre la inversión ya sean de consideración cuando analizamos el crecimiento “histórico” del País del 0.8% en el último trimestre del 2019 y la expectativa de crecimiento para 2019 del 1.2%.
Si ponderamos el resultado y analizamos que las actividades primarias son lo rescatable de nuestra economía, tenemos la obligación de exigir a nuestros gobernantes federales, estatales y municipales, políticas públicas que nos lleven a cambiar esa expectativa por un verdadero crecimiento que impacten positivamente en las actividades secundarias y terciarias, que sean tangibles y que puedan realmente permearse hacia nuestra lastimada sociedad.
Si hablamos de competitividad en el entorno y en las empresas, la inseguridad está íntimamente relacionada con la economía. En particular, la delincuencia y la violencia pueden inhibir la producción de bienes y servicios, constituyéndose, en un serio impedimento para el mayor vigor económico. No podemos dejar de pensar que uno de los principales efectos del creciente deterioro de la seguridad pública en Morelos es la generación de obstáculos al crecimiento y desarrollo económico.
Pensar en invertir actualmente puede llevarnos a creer que vamos a gastar, y las empresas deben decidir de manera correcta bajo que esquema y bajo qué condiciones deben de hacerlo para mantener e incrementar su capacidad productiva; la inversión es el componente más volátil de la demanda.
En nuestro estado, la inversión a mediano y largo plazo debe planearse con cautela, tiene que reflejar la verdadera necesidad y vocación de nuestros municipios, porque no es lo mismo Cuernavaca que Ayala ni que Tlayacapan y menos que Tepoztlán, lo único en lo que coinciden es que la prioridad debe ser, el desarrollo de infraestructura acorde al potencial de las capacidades naturales y adquiridas, y sobre cualquiera de ellas, el poder garantizar Seguridad y proyectos rentables que el resultado sea: Ganar-Ganar.
Hoy más que nunca, nuestra tranquilidad social y garantía sobre la tenencia de la tierra debe ser el pilar fundamental para la atracción de inversiones, y sin lugar a dudas la seguridad para las empresas y empresarios el detonante de ello.
Generemos inversión en temas de maquinaria, instalaciones, materias primas, productos terminados, en procesos de fabricación y en vivienda, la oportunidad debemos de buscarla y concretarla, Morelos tiene la ubicación geográfica estratégica del centro del país mas importante, debemos de aprovecharla.
No olvidemos que aquí vivimos, que aquí crecimos y que aquí queremos permanecer.
Por eso, es indispensable que se restablezca, cuanto antes, un ambiente favorable de tranquilidad y paz pública.
Busquemos la Inversión ofreciendo un producto exitoso, y Morelos tiene todo para serlo.
¡Que así sea!