El daño colateral está hecho. Sin lugar a dudas, el retraso en la firma de los protocolos de seguridad pública, entre el Ayuntamiento de Cuernavaca y el gobierno del estado, arrojó muchas víctimas. La falta de comunicación entre el gobierno capitalino y el de Cuauhtémoc Blanco causó una herida mayúscula. Un padecimiento terminal que llevo a cada ciudadano a generar miedo y zozobra. Sin embargo, los crímenes que se ha registrado en los últimos días, entre embolsados y restos humanos, arrojados en la vía pública, destacan integrantes de la delincuencia organizada. O sea, a los criminales los están matando y exhibiendo sus restos. Pero la pregunta es: quién es el autor intelectual y material de estos crímenes? No comparto la idea de que sea la guerra entre los cárteles. Dicen los que saben. Que quienes están matando a estos integrantes de la "maña", son el propio gobierno federal, a través de un grupo de elite.

Primero. Para desactivar a las organizaciones delictivas; Es más fácil matarlos que enjuiciarlos que mantenerlos en prisión donde seguirán operando.

Segundo. Exhibir sus cuerpos en las condiciones en que se hacen e inhibir el fenómeno delincuencia, ya que nadie, aparentemente, le gustaría terminar en esas circunstancias.

Y tercero. Se trata de una limpia, donde se mide la fuerza del Estado.

Luego de la reunión de Cuauhtémoc Blanco gobernador de Morelos y el alcalde Antonio Villalobos Adán, ha disminuido sensiblemente el índice delictivo.

Pero tuvieron que pasar nueve meses para que se firmara en Cuernavaca el Mando Coordinado, ya que hay que recordar que en marzo pasado el gobierno del estado hizo lo conducente con los demás municipios, excepto Cuernavaca, Ocuituco y Tepalcingo.

Fue en la primera quincena de marzo de 2019, cuando en tiempo y forma Cuauhtémoc Blanco Bravo, severamente criticado, cumplió con la convocatoria y la firma para realizar el convenio con los municipios de Morelos, que pretende combatir la violencia e inseguridad en la entidad. Sin embargo, "diferencias" o "revanchismos" políticos de parte del alcalde, provocaron el retraso de casi un año en la firma de estos protocolos. Esto provocó que estos tres municipios no recibiera los 900 millones de pesos asignados para la homologación de salarios de los policías, muchos de esos con salarios irrisorios.

En el mando coordinado se destaca que la parte operativa quedará a cargo del gobierno estatal y la administrativa de los municipios.

El mando coordinado no busca centralizar o monopolizar el trabajo de los cuerpos policiacos, sino trabajar de manera coordinada con los municipios y sus autoridades con el fin de garantizar la seguridad ciudadana, ha destacado Blanco Bravo.

Con esto también se pretende homologar criterios de operación y estrategias en las zonas con mayores índices delictivos en la entidad, además de apoyar los trabajos de las autoridades locales.

La estrategia consiste en fortalecer la confianza de los ciudadanos y fomentar la cultura de la denuncia en los números de emergencia 911 y 088.