/ jueves 29 de diciembre de 2022

Nuevas Reglas | Blanco, Sheinbaum y el futuro del gobernador

Al gobernador de Morelos le molestan las campañas anticipadas. Asegura que ya tiene en mente su futuro político “Ya lo tengo aquí (se señala la cabeza) pero no me puedo adelantar. Ya veo espectaculares por todos lados y ya todo el mundo quiere ser gobernador o gobernadora. Pues esperensen (sic) si no es fácil. Es como decimos en el futbol, mucho chile pica… ya todos y veo espectaculares y, cálmense, pues si todavía faltan dos años”.

Quienes emprenden la promoción de su imagen con miras a obtener la candidatura a un cargo de elección popular antes de que inicien los procesos internos de los partidos violan la equidad de las contiendas y probablemente cometen un delito electoral. En ese supuesto estaría directamente la figura de Margarita González Saravia, y de forma tal vez menos cínica, Ángel García Yáñez, Agustín Alonso Gutiérrez, Francisco Sánchez Zavala, en el plano local. Las imágenes de los cuatro políticos aparecen con relativa frecuencia en espectaculares, lonas, carteles, y otras formas de propaganda, muchas de ellas prohibidas expresamente por la legislación electoral, como los gallardetes.

Margarita González Saravia no es la favorita del gobernador para sucederlo, él preferiría a alguien de su equipo y es entendible que mientras su grupo político tenga el control relativo de Morena, el partido en que milita González Saravia hace bastante más tiempo que los cercanos a Blanco. Así que darle un raspón a la directora de la Lotería Nacional y a otros adversarios políticos, como García Yáñez, Alonso Gutiérrez y Sánchez Zavala, no pareció incomodarlo ni un poco. Lo que probablemente no calculó fue que el alcance de sus comentarios podría ser mucho mayor, sobre todo si se equipara a la otra esfera donde las campañas se han adelantado mucho, la contienda presidencial.

Porque los aspirantes a la presidencia de la República de Morena también han adelantado sus campañas y en Morelos ya trabajan brigadas a favor de Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Claudia Sheinbaum. En el caso de la última, la cantidad de bardas pintadas y espectaculares supera con mucho a las de políticos locales, excepto las de Margarita González que aparecieron moderadamente en noviembre y ad nauseam en diciembre. Así que si la molestia del gobernador es por las campañas anticipadas, tampoco estará conforme con la publicidad anticipada de Sheinbaum, López o Ebrard.

Probablemente sin querer, Cuauhtémoc Blanco le dio un recargón a quien aparece como la favorita del padrino político del ex futbolista, el presidente López Obrador, para ocupar la silla presidencial. Si no fue accidental, el raspón podría entenderse como parte de la serie de supuestos desencuentros entre la jefa de gobierno de la CDMX y el gobernador de Morelos que se cuentan en los chismes de políticos desde hace casi un año.

La otra parte de la declaración de Cuauh, respecto de su futuro político tampoco es complicada de entender, aunque hay quienes lo colocan en el Legislativo, probablemente como Senador, el gobernador de Morelos dio claves sobre sus intenciones futuras.

Cierto que un escaño en el Senado paga 105 mil pesos al mes y prestaciones; más que la gubernatura de Morelos por la que Cuauhtémoc Blanco recibe 100 mil pesos mensuales con menores derechos, pero el perfil de Blanco Bravo, una personalidad acostumbrada a los reflectores difícilmente le haría sentirse cómodo en el Senado.

“Esto es lo que me gusta a mí. Estar en contacto con la gente, ver las pavimentaciones, ver los drenajes, eso es lo que me encanta, estar aquí al lado de la gente, yo se los he dicho muchas veces… igual cuando estaba en mi barrio”. El futuro de Cuauhtémoc podría estar también en una alcaldía de la Ciudad de México. Los sueldos son bastante similares al del gobernador de Morelos, 104 mil a 109 mil pesos, y aunque ninguna de las demarcaciones de la Ciudad de México tiene más habitantes que Morelos (la más cercana es Iztapalapa con 1.85 millones de pobladores, unos cien mil menos que Morelos), la densidad poblacional de cualquiera de ellas entre 668 y 17 mil 369 personas por kilómetro cuadrado, supera enormemente la de Morelos, de apenas 68. Un reto profundamente diferente al actual. Cualquiera de las alcaldías, aunque con menor notoriedad que la jefatura de gobierno, parecen mucho más convenientes en relaciones costo beneficio. Relevar a Claudia Sheinbaum significaría para Cuauhtémoc Blanco un salario de apenas 111 mil 178 pesos, menos de ocho mil arriba del peor pagado de los alcaldes y con muchos más problemas.

@martinellito

dmartinez@elsoldecuernavaca.com.mx

Al gobernador de Morelos le molestan las campañas anticipadas. Asegura que ya tiene en mente su futuro político “Ya lo tengo aquí (se señala la cabeza) pero no me puedo adelantar. Ya veo espectaculares por todos lados y ya todo el mundo quiere ser gobernador o gobernadora. Pues esperensen (sic) si no es fácil. Es como decimos en el futbol, mucho chile pica… ya todos y veo espectaculares y, cálmense, pues si todavía faltan dos años”.

Quienes emprenden la promoción de su imagen con miras a obtener la candidatura a un cargo de elección popular antes de que inicien los procesos internos de los partidos violan la equidad de las contiendas y probablemente cometen un delito electoral. En ese supuesto estaría directamente la figura de Margarita González Saravia, y de forma tal vez menos cínica, Ángel García Yáñez, Agustín Alonso Gutiérrez, Francisco Sánchez Zavala, en el plano local. Las imágenes de los cuatro políticos aparecen con relativa frecuencia en espectaculares, lonas, carteles, y otras formas de propaganda, muchas de ellas prohibidas expresamente por la legislación electoral, como los gallardetes.

Margarita González Saravia no es la favorita del gobernador para sucederlo, él preferiría a alguien de su equipo y es entendible que mientras su grupo político tenga el control relativo de Morena, el partido en que milita González Saravia hace bastante más tiempo que los cercanos a Blanco. Así que darle un raspón a la directora de la Lotería Nacional y a otros adversarios políticos, como García Yáñez, Alonso Gutiérrez y Sánchez Zavala, no pareció incomodarlo ni un poco. Lo que probablemente no calculó fue que el alcance de sus comentarios podría ser mucho mayor, sobre todo si se equipara a la otra esfera donde las campañas se han adelantado mucho, la contienda presidencial.

Porque los aspirantes a la presidencia de la República de Morena también han adelantado sus campañas y en Morelos ya trabajan brigadas a favor de Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Claudia Sheinbaum. En el caso de la última, la cantidad de bardas pintadas y espectaculares supera con mucho a las de políticos locales, excepto las de Margarita González que aparecieron moderadamente en noviembre y ad nauseam en diciembre. Así que si la molestia del gobernador es por las campañas anticipadas, tampoco estará conforme con la publicidad anticipada de Sheinbaum, López o Ebrard.

Probablemente sin querer, Cuauhtémoc Blanco le dio un recargón a quien aparece como la favorita del padrino político del ex futbolista, el presidente López Obrador, para ocupar la silla presidencial. Si no fue accidental, el raspón podría entenderse como parte de la serie de supuestos desencuentros entre la jefa de gobierno de la CDMX y el gobernador de Morelos que se cuentan en los chismes de políticos desde hace casi un año.

La otra parte de la declaración de Cuauh, respecto de su futuro político tampoco es complicada de entender, aunque hay quienes lo colocan en el Legislativo, probablemente como Senador, el gobernador de Morelos dio claves sobre sus intenciones futuras.

Cierto que un escaño en el Senado paga 105 mil pesos al mes y prestaciones; más que la gubernatura de Morelos por la que Cuauhtémoc Blanco recibe 100 mil pesos mensuales con menores derechos, pero el perfil de Blanco Bravo, una personalidad acostumbrada a los reflectores difícilmente le haría sentirse cómodo en el Senado.

“Esto es lo que me gusta a mí. Estar en contacto con la gente, ver las pavimentaciones, ver los drenajes, eso es lo que me encanta, estar aquí al lado de la gente, yo se los he dicho muchas veces… igual cuando estaba en mi barrio”. El futuro de Cuauhtémoc podría estar también en una alcaldía de la Ciudad de México. Los sueldos son bastante similares al del gobernador de Morelos, 104 mil a 109 mil pesos, y aunque ninguna de las demarcaciones de la Ciudad de México tiene más habitantes que Morelos (la más cercana es Iztapalapa con 1.85 millones de pobladores, unos cien mil menos que Morelos), la densidad poblacional de cualquiera de ellas entre 668 y 17 mil 369 personas por kilómetro cuadrado, supera enormemente la de Morelos, de apenas 68. Un reto profundamente diferente al actual. Cualquiera de las alcaldías, aunque con menor notoriedad que la jefatura de gobierno, parecen mucho más convenientes en relaciones costo beneficio. Relevar a Claudia Sheinbaum significaría para Cuauhtémoc Blanco un salario de apenas 111 mil 178 pesos, menos de ocho mil arriba del peor pagado de los alcaldes y con muchos más problemas.

@martinellito

dmartinez@elsoldecuernavaca.com.mx