/ miércoles 3 de julio de 2024

¿Quién es Bobby-Robert F. Kennedy Jr.?

Por Mitzi Pineda

En esta columna de opinión, quiero abordar el debate sobre el personaje que podría definir las próximas elecciones de Estados Unidos. No porque vaya a ganar, sino por lo que significa su presencia en la boleta: una tercera vía y la influencia de los medios de comunicación en la democracia más recalcitrante del globo.

Pero antes, un poco de contexto.

Robert F. Kennedy Jr. es hijo de Robert F. Kennedy, quien fue uno de los ocho hermanos de John F. Kennedy, presidente de Estados Unidos de 1961 a 1963, conocido por su carisma, su participación en la crisis de los misiles con Cuba y su trágico asesinato en 1963 en Dallas. Al igual que su hermano, Robert F. Kennedy también participó activamente en la política. Primero en la campaña de John y, posteriormente, como Fiscal General, donde se destacó por su gestión, lanzando una exitosa campaña contra el crimen organizado que aumentó las condenas en un 800% durante su mandato.

Después de su tiempo como Fiscal General, Robert F. Kennedy se convirtió en senador por Nueva York, abanderando causas como la promoción del voto afroamericano, la incorporación de jóvenes afroamericanos a las universidades y la mejora de las condiciones de vida de la población americana con mayores carencias: los pobres, los jóvenes, las minorías raciales y los nativos americanos.

Tras el asesinato de su hermano y el gobierno de Lyndon B. Johnson en 1968, Robert se postuló como candidato presidencial por el Partido Demócrata. Sin embargo, también fue asesinado tras anunciar su victoria en las primarias en el Hotel Ambassador en Los Ángeles, California.

Puede ser casualidad, pero parecía que la dinastía Kennedy no volvería a tocar el solo deseo de la silla presidencial —hasta ahora—.

Robert F. Kennedy Jr.

Hoy, Robert F. Kennedy Jr., a sus 70 años, se postula como una tercera vía en la política estadounidense. Bobby es un abogado muy reconocido quien ha participado en organizaciones no gubernamentales en defensa del medio ambiente como el Natural Resources Defense Council (NRDC), también es profesor de Derecho Ambiental y abogado en la clínica de litigios ambientales Pace Law School.

En abril de 2023, lanzó su candidatura para las elecciones presidenciales de 2024, primero por el Partido Demócrata y ahora como independiente. Un auténtico activista y defensor del medio ambiente, respaldado por el legado político de la dinastía Kennedy, frente a uno de los países más contaminantes y explotadores de recursos naturales del mundo. Suena como una alternativa política prometedora. ¿Y entonces?

A pesar de su legado y su activismo, los medios de comunicación más influyentes de Estados Unidos, como "The Guardian", "The New York Times" y "CNN" han mostrado una clara tendencia a su descalificación. Lo han tachado de "desconectado de la realidad", "antivacunas", y a pesar de sus declaraciones por matizar, aclarar y contextualizar, estas publicaciones continúan. Este esfuerzo refleja el poder de los medios en la política y cómo pueden influir en la percepción pública.

Al momento de retirarse de las primarias demócratas en octubre, Robert F. Kennedy Jr. apostó por convertirse en una tercera vía que representa a quienes no encuentran entusiasmo en la campaña de Biden y también al ala que exige más contundencia a las acciones frente al cambio climático. Entonces, aunque actualmente solo está en la boleta electoral de siete de los cincuenta estados y no apareció en el debate de CNN, se sabe que su presencia podría restarle votos al candidato demócrata.

Por último y para sumarle complejidad al escenario, tenemos a Elon Musk quien recientemente reposteó un video titulado "¿Quién es Bobby Kennedy? ¿qué si no estuviera loco?", sugiriendo que vale la pena prestar atención a Kennedy.

En este video, muy íntimo, sobre su vida y carrera política, Bobby aborda con buen humor lo que los medios dicen de él, e incluso habla de su enfermedad: la disfonía espasmódica. Este trastorno neurológico afecta los músculos de la laringe utilizados para hablar, causando interrupciones o espasmos involuntarios en su voz, haciéndola sonar tensa o entrecortada. Esta condición es una de las razones por las que no se le percibe tan carismático como lo fue su tío.

El guiño que Musk dejó entrever sugiere que podría haber estado interesado en apoyar su campaña. Tal vez por esta razón, después de eso los medios han especulado que Trump estaba interesado en incluir a Musk en su gabinete.

Finalmente, independientemente de sus pocas posibilidades de ganar, la candidatura de Robert F. Kennedy Jr. representa una crítica a la falta de legitimidad del Partido Demócrata en la defensa de las causas progresistas y su coptación por intereses de grandes corporaciones.

La falta de despegue de su figura en medios hace cuestionarse a más de uno sobre la verdadera existencia de la democracia estadounidense. Su poca proyección en las elecciones pareciera una censura a las voces disidentes, lo que es un recordatorio de la influencia de los medios de comunicación, la falta de representación de una gran mayoría preocupada por la crisis climática y el inicio del debate de una tercera vía.

MITZI PINEDA es asociada del Programa Jóvenes Comexi. Internacionalista, maestra en administración y políticas públicas por el CIDE y funcionaria pública.

Por Mitzi Pineda

En esta columna de opinión, quiero abordar el debate sobre el personaje que podría definir las próximas elecciones de Estados Unidos. No porque vaya a ganar, sino por lo que significa su presencia en la boleta: una tercera vía y la influencia de los medios de comunicación en la democracia más recalcitrante del globo.

Pero antes, un poco de contexto.

Robert F. Kennedy Jr. es hijo de Robert F. Kennedy, quien fue uno de los ocho hermanos de John F. Kennedy, presidente de Estados Unidos de 1961 a 1963, conocido por su carisma, su participación en la crisis de los misiles con Cuba y su trágico asesinato en 1963 en Dallas. Al igual que su hermano, Robert F. Kennedy también participó activamente en la política. Primero en la campaña de John y, posteriormente, como Fiscal General, donde se destacó por su gestión, lanzando una exitosa campaña contra el crimen organizado que aumentó las condenas en un 800% durante su mandato.

Después de su tiempo como Fiscal General, Robert F. Kennedy se convirtió en senador por Nueva York, abanderando causas como la promoción del voto afroamericano, la incorporación de jóvenes afroamericanos a las universidades y la mejora de las condiciones de vida de la población americana con mayores carencias: los pobres, los jóvenes, las minorías raciales y los nativos americanos.

Tras el asesinato de su hermano y el gobierno de Lyndon B. Johnson en 1968, Robert se postuló como candidato presidencial por el Partido Demócrata. Sin embargo, también fue asesinado tras anunciar su victoria en las primarias en el Hotel Ambassador en Los Ángeles, California.

Puede ser casualidad, pero parecía que la dinastía Kennedy no volvería a tocar el solo deseo de la silla presidencial —hasta ahora—.

Robert F. Kennedy Jr.

Hoy, Robert F. Kennedy Jr., a sus 70 años, se postula como una tercera vía en la política estadounidense. Bobby es un abogado muy reconocido quien ha participado en organizaciones no gubernamentales en defensa del medio ambiente como el Natural Resources Defense Council (NRDC), también es profesor de Derecho Ambiental y abogado en la clínica de litigios ambientales Pace Law School.

En abril de 2023, lanzó su candidatura para las elecciones presidenciales de 2024, primero por el Partido Demócrata y ahora como independiente. Un auténtico activista y defensor del medio ambiente, respaldado por el legado político de la dinastía Kennedy, frente a uno de los países más contaminantes y explotadores de recursos naturales del mundo. Suena como una alternativa política prometedora. ¿Y entonces?

A pesar de su legado y su activismo, los medios de comunicación más influyentes de Estados Unidos, como "The Guardian", "The New York Times" y "CNN" han mostrado una clara tendencia a su descalificación. Lo han tachado de "desconectado de la realidad", "antivacunas", y a pesar de sus declaraciones por matizar, aclarar y contextualizar, estas publicaciones continúan. Este esfuerzo refleja el poder de los medios en la política y cómo pueden influir en la percepción pública.

Al momento de retirarse de las primarias demócratas en octubre, Robert F. Kennedy Jr. apostó por convertirse en una tercera vía que representa a quienes no encuentran entusiasmo en la campaña de Biden y también al ala que exige más contundencia a las acciones frente al cambio climático. Entonces, aunque actualmente solo está en la boleta electoral de siete de los cincuenta estados y no apareció en el debate de CNN, se sabe que su presencia podría restarle votos al candidato demócrata.

Por último y para sumarle complejidad al escenario, tenemos a Elon Musk quien recientemente reposteó un video titulado "¿Quién es Bobby Kennedy? ¿qué si no estuviera loco?", sugiriendo que vale la pena prestar atención a Kennedy.

En este video, muy íntimo, sobre su vida y carrera política, Bobby aborda con buen humor lo que los medios dicen de él, e incluso habla de su enfermedad: la disfonía espasmódica. Este trastorno neurológico afecta los músculos de la laringe utilizados para hablar, causando interrupciones o espasmos involuntarios en su voz, haciéndola sonar tensa o entrecortada. Esta condición es una de las razones por las que no se le percibe tan carismático como lo fue su tío.

El guiño que Musk dejó entrever sugiere que podría haber estado interesado en apoyar su campaña. Tal vez por esta razón, después de eso los medios han especulado que Trump estaba interesado en incluir a Musk en su gabinete.

Finalmente, independientemente de sus pocas posibilidades de ganar, la candidatura de Robert F. Kennedy Jr. representa una crítica a la falta de legitimidad del Partido Demócrata en la defensa de las causas progresistas y su coptación por intereses de grandes corporaciones.

La falta de despegue de su figura en medios hace cuestionarse a más de uno sobre la verdadera existencia de la democracia estadounidense. Su poca proyección en las elecciones pareciera una censura a las voces disidentes, lo que es un recordatorio de la influencia de los medios de comunicación, la falta de representación de una gran mayoría preocupada por la crisis climática y el inicio del debate de una tercera vía.

MITZI PINEDA es asociada del Programa Jóvenes Comexi. Internacionalista, maestra en administración y políticas públicas por el CIDE y funcionaria pública.