/ miércoles 12 de abril de 2023

Elotes y tala

Dos escenas llaman la atención desde la autopista que conecta Morelos con la Ciudad de México y Acapulco.

Al pie de carretera más de 30 puestos de venta de elotes y esquites, con decenas de automovilistas que se detienen a comprar o comer ahí. Y en otros puntos, el panorama de la tala de árboles.

La primera implica un riesgo que con toda seguridad será controlado por las autoridades federales, y la segunda ya es atendida con al menos 300 elementos del Ejército enviados a realizar vigilancia coordinada con autoridades estatales.

El reforzamiento de la seguridad requiere de la colaboración de todas las corporaciones y de un mayor acercamiento que fortalezca la confianza de la ciudadanía.

En Morelos, las fuerzas federales cuentan con altos niveles de aprobación ciudadana; hay confianza en su desempeño. Los datos de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del INEGI indican que 84.6 por ciento de las y los morelenses respaldan a la Marina, 82.3 al Ejército y 77.3 a la Guardia Nacional.

La imagen de las policías locales disminuye: 39.1 por ciento confía en la Estatal y 30.3 en la Municipal.

En semanas recientes ha sido notable la presencia militar en labores diversas, que la revelan como una corporación más accesible a las y los ciudadanos y a la atención de sus necesidades. Labores sociales y de acercamiento, como las realizadas para la preservación de las barrancas de Cuernavaca.

Una forma distinta de entender la seguridad, un reconocimiento de que lo nacional, público y ciudadano no pueden atenderse de forma aislada, de acuerdo al fuero que representa el tipo de delito.

En Morelos, la presencia de corporaciones federales refleja mayor coordinación interinstitucional, como lo es la participación estatal en la primera Reunión Regional de la Zona Centro, junto con la Ciudad de México, Guerrero, Puebla, Tlaxcala e Hidalgo. Una oportunidad de profundizar los avances en seguridad.

Los datos de incidencia delictiva en la entidad revelan áreas de oportunidad que no pueden obviarse. Según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, al primer bimestre del año en comparación con 2019, los ilícitos de alto impacto subieron 18 por ciento y la entidad se ubicó como la tercera del país en tasa por cada 100 mil habitantes.

Conocer e importar buenas prácticas en el combate a la delincuencia incrementa las posibilidades de reducir la incidencia y aumentar la certeza ciudadana.

Salvador Guerrero Chiprés

@guerrerochipres

Dos escenas llaman la atención desde la autopista que conecta Morelos con la Ciudad de México y Acapulco.

Al pie de carretera más de 30 puestos de venta de elotes y esquites, con decenas de automovilistas que se detienen a comprar o comer ahí. Y en otros puntos, el panorama de la tala de árboles.

La primera implica un riesgo que con toda seguridad será controlado por las autoridades federales, y la segunda ya es atendida con al menos 300 elementos del Ejército enviados a realizar vigilancia coordinada con autoridades estatales.

El reforzamiento de la seguridad requiere de la colaboración de todas las corporaciones y de un mayor acercamiento que fortalezca la confianza de la ciudadanía.

En Morelos, las fuerzas federales cuentan con altos niveles de aprobación ciudadana; hay confianza en su desempeño. Los datos de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del INEGI indican que 84.6 por ciento de las y los morelenses respaldan a la Marina, 82.3 al Ejército y 77.3 a la Guardia Nacional.

La imagen de las policías locales disminuye: 39.1 por ciento confía en la Estatal y 30.3 en la Municipal.

En semanas recientes ha sido notable la presencia militar en labores diversas, que la revelan como una corporación más accesible a las y los ciudadanos y a la atención de sus necesidades. Labores sociales y de acercamiento, como las realizadas para la preservación de las barrancas de Cuernavaca.

Una forma distinta de entender la seguridad, un reconocimiento de que lo nacional, público y ciudadano no pueden atenderse de forma aislada, de acuerdo al fuero que representa el tipo de delito.

En Morelos, la presencia de corporaciones federales refleja mayor coordinación interinstitucional, como lo es la participación estatal en la primera Reunión Regional de la Zona Centro, junto con la Ciudad de México, Guerrero, Puebla, Tlaxcala e Hidalgo. Una oportunidad de profundizar los avances en seguridad.

Los datos de incidencia delictiva en la entidad revelan áreas de oportunidad que no pueden obviarse. Según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, al primer bimestre del año en comparación con 2019, los ilícitos de alto impacto subieron 18 por ciento y la entidad se ubicó como la tercera del país en tasa por cada 100 mil habitantes.

Conocer e importar buenas prácticas en el combate a la delincuencia incrementa las posibilidades de reducir la incidencia y aumentar la certeza ciudadana.

Salvador Guerrero Chiprés

@guerrerochipres