El público morelense asistió al Centro Cultural Teopanzolco para disfrutar de la divertida obra de teatro El son de la marchanta de la compañía Colonche Cabaret.
Los creadores de la puesta en escena toman como referencia una de las tradiciones prehispánicas más importantes en México, como lo es el tianguis, que ha ido evolucionando a lo largo de los siglos; en esta obra, el tianguis es un microcosmos y metáfora de la realidad social del país.
Actualmente, México atraviesa una crisis en todos los sentidos, está dividido y violentado, y todo está a la venta. Una marchanta y sus jitomates mallugados, un ramo de cilantro para espantar las balas y la indiferencia de un país en donde nunca pasa nada, son los ingredientes de esta historia, donde se observa cómo el poder consume las mentes y genera cambios en las personas.
Durante el desarrollo de este divertido drama con un toque de conciencia social, los protagonistas se presentan con un trío musical que ameniza las escenas con huapangos huastecos que cuentan esta historia llena de cebollazos de realidad, contado por personajes muy característicos del tianguis del Tangamanga. Mientras la obra transcurrió, los actores estuvieron acompañados de un trío musical que le puso ritmo a cada escena.
Cabe destacar que el objetivo principal de la compañía Colonche Cabaret es producir y promover espectáculos de teatro cabaret por medio de creaciones propias; al abordar las problemáticas sociales de su entorno para hacer una crítica que lleve al espectador a una reflexión a través del humor y la risa.