Niños y adultos se dieron cita en la sala Manuel M. Ponce, del Centro Cultural Jardín Borda para disfrutar de los tradicionales Domingos infantiles, con el divertido espectáculo El árbol de los sombreros de Perico el Payaso loco.
Durante la trama Perico inicia narrando su vida, obra y casi milagros que ha realizado, llevando a los presentes un retrato de cómo vive la familia mexicana desde hace muchos años.
La familia de Perico es “normal” y también muy mexicana, pues las anormales son las brujas buena y mala que hacen de Perico, desde que nace, un personaje muy chistoso: la bruja mala le pone cara de chiste y la buena le regala un bonito y maravilloso árbol, cuyos frutos son sombreros.
Perico es muy feliz con sus sombreros, compartiéndolos con la gente que lo rodea y quiere mucho. Entre los sombreros, hubo unos muy peculiares, pues eran una pelota ponchada, un perico, un paliacate y una bacinica; y al ponérselos, Perico se convierte en un personaje diferente cada vez.
Esta obra tiene como propósito divertir a los niños a través de la capacidad de Perico de transformarse en lo que él quiera.