Con gran alegría y entusiasmo, Graciela Rodríguez de Gleason inauguró su exposición pictórica Una flor, una vida en el Museo de las Ciudad de Cuernavaca (Mucic).
La exposición está integrada por obras que Graciela ha realizado a lo largo de su vida, pues desde muy pequeña comenzó a desarrollar la pasión por la pintura y a aprender de manera autodidacta.
La artista pinta todo aquello que le gusta o le da sentido a su vida, algunas de las técnicas que suele utilizar son acuarela, óleo, pastel, acrílico y técnica mixta; lo que da como resultado una muestra muy colorida que hace honor a varios temas, especialmente a la naturaleza.
Son cuadros que yo pinté sin escuela, todo lo aprendí yo sola con la práctica. Siempre he sido admiradora de las flores, los paisajes, la naturaleza y el retrato y me gusta plasmar todo eso en los lienzos Graciela Rodríguez de Gleason
Sin duda, fue un día muy especial, pues es la primera vez que tiene la oportunidad de mostrar su obra al público; dando a conocer ese gran talento que tiene y la pasión que le ha puesto a la creación artística desde hace muchos años.
Nunca me imaginé que iba a pasar algo así, todo se dio de manera casual, mi hija se enteró que en este espacio están promoviendo artistas, surgió la idea de exponer, revisaron mi obra y les gustó. Todos estos cuadros, en realidad están en mi casa y las casas de mis hijos, es una colección propia y me da gusto ahora compartirla con más personas
A pesar de aprender a pintar de manera autodidacta, Graciela ha querido tener una formación profesional, y actualmente toma clases una vez por semana, para así perfeccionar su técnica.