Si buscas una experiencia diferente y descubrir las bellezas naturales del Pacífico Mexicano, Puerto Vicente Guerrero es un punto turístico que destaca entre los balnearios naturales de la Costa Grande guerrerense.
Este pequeño poblado de pescadores que hasta hace unos años sólo era visitado por habitantes de los municipios de Técpan de Galeana y Zihuatanejo, ahora se encuentra en la mira de turistas nacionales e internacionales debido a sus cálidas aguas, rica gastronomía y actividades acuáticas que ahí se pueden realizar.
Debido a que se encuentra rodeado de montañas y que para llegar hasta este hermoso lugar hay que desviarse de la carretera federal y tomar un tramo carretero de dos kilómetros aproximadamente, a Puerto Vicente Guerrero se le conoce también como Puerto Escondido.
Este hermoso lugar pertenece al municipio de Técpan de Galeana y forma parte de una zona turística ecológica e incluyente junto con Bahías de Papanoa y Piedra de Tlacoyunque.
¿Cómo llegar a Puerto Vicente Guerrero?
Puerto Vicente Guerrero se encuentra a 48 kilómetros aproximadamente de la ciudad de Técpan de Galeana y a dos horas del binomio turístico de playa Ixtapa-Zihuatanejo.
Si viaja desde Ciudad de México, puede hacerlo vía aérea ya sea llegando al puerto de Acapulco o en Zihuatanejo, con un costo del boleto que va de los mil 700 a los 3 mil 300 en temporada alta.
De Acapulco a Técpan de Galeana son 3 horas aproximadamente en carretera, ya sea en autobús, cuyo costo va de los 420 a los 550 pesos por persona, o en coche con un gasto promedio de 500 pesos en gasolina y sin casetas, pues se llega fácilmente por la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo.
Práctica deportes acuáticos en este destino
Para quienes gustan de los deportes acuáticos, en Puerto Vicente Guerrero pueden disfrutar de submarinismo, pesca, paseos en lancha por $500 pesos; o bien, banana, snorkelear por $150 por persona o simplemente recostarse en las hamacas que se encuentran en el agua… ¡sí, en el agua!, instaladas bajo la mayoría de los restaurantes del lugar.
Y si lo tuyo es el buceo, también puedes sumarte a los tours de exploración por un barco hundido desde hace más de 20 años y que se ha convertido en un hermoso arrecife coralino.
Su barrera de piedras y su muelle forman la alberca de agua salada más grande del estado, donde chicos y grandes disfrutan de estas actividades donde incluso se pueden avistar delfines y tortugas que por temporadas se adentran a la bahía.
Caminar hasta su playa virgen, es otra de las actividades para quienes gustan de la naturaleza y el ecoturismo.
En este lugar no hay lujos, todo está construido con materiales típicos de la región y es ahí donde radica su encanto.
Prueba la rica gastronomía del lugar
La comida del mar no puede dejar de ser una de las especialidades del lugar, especialmente si se prepara al momento y con una gran variedad de pescados y mariscos.
Entre los platillos típicos se encuentran La Langosta, El Pesebre, los famosos los tamales de arroz envueltos en hojas de maíz, las tiritas de pescado, pescado en “chile verde a la Richar”, camarones al mango habanero y el charolazo que es una combinación de mariscos.
Mención aparte son las ricas bebidas típicas del lugar, como el agua de coco con ginebra, el rico chlate y las ricas aguas de papaya, tamarindo, limón y sandía.
Piedra del Tlacoyunque, maravilla de la naturaleza
La belleza de este lugar coincide con el misterio de su origen, pues hay quienes dicen que la enorme roca ubicada en la orilla del mar, es un meteorito que cayó hace miles de años y otros, aseguran que simplemente es un capricho de la naturaleza.
Piedra de Tlacoyunque, se encuentra en la playa del mismo nombre ubicada a sólo 10 kilómetros de Puerto Vicente Guerrero y es el principal atractivo de dicho lugar.
La enorme roca cóncava tiene unos 35 metros de altura aproximadamente y en su interior se formó una piscina natural, la cual es el principal atractivo de este hermoso lugar.
De oleaje intenso, cristalinas aguas y arena fina, la playa de Tlacoyunque es muy amplia y generalmente poco visitada por grupos grandes de personas, por lo que es un excelente lugar para estar en contacto con la naturaleza.
Esta zona fue decretada Área Natural Protegida en 1986 con el fin de preservar la flora y fauna de los acantilados rocosos que envuelven la playa, además de que también es un santuario de tortugas que arriban cada año para poner sus huevos y tener sus crías. Fue precisamente en este lugar donde se instaló el primer campamento tortuguero de la zona.
Esta zona aún no cuenta con infraestructura turística, por lo que aún se conserva virgen y sólo hay unos dos restaurantes que ofrecen pescados y mariscos a los visitantes.
Descubre Bahías de Papanoa
Kilómetros más adelante encontramos Bahías de Papanoa, un destino turístico que está cobrando auge entre viajeros de todo el país y el extranjero, pues cuenta con cálidas y tranquilas aguas, además de una playa incluyente para que personas con capacidades diferentes disfruten de este hermoso lugar.
El destino turístico se encuentra cerca de Puerto Vicente Guerrero y en conjunto con las playas Cayaquitos, Piedra del Tlacoyunque y Ojo de Agua, forman las Bahías de Papanoa.
Si tu plan es quedarte a disfrutar varios días, en Bahías de Papanoa también hay hospederías que ofrecen habitaciones desde $874 pesos la noche.
Debido a su cálido clima y la biodiversidad del lugar, son el sitio ideal para pasar unas ricas vacaciones, convivir con la naturaleza, relajarse y dejar la rutina.
En estos puntos turísticos, las personas con capacidades diferentes pueden tener acceso también a diversas actividades acuáticas y las mascotas son bienvenidas en la mayoría de los establecimientos.
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