En el municipio indígena de Coatetelco, Morelos, el Día de Muertos tiene un toque particular con sus tradicionales ofrendas colgantes. Este ritual, es bello no solo por sus elementos tradicionales, sino por la forma en que se coloca la ofrenda: suspendida en el aire.
¿Qué son las ofrendas colgantes de Coatetelco?
A diferencia de las ofrendas típicas que se colocan en mesas o en altares sobre el suelo, las ofrendas colgantes de Coatetelco están suspendidas, lo que las convierte en ofrendas únicas en Morelos.
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En estas ofrendas, los elementos tradicionales como flores, frutas, tamales, mole y piezas de barro se cuelgan cuidadosamente, lo que crea un espectáculo visual que honra a los difuntos de una manera solemne.
Esta tradición, además, conecta a la gente con sus ancestros, en una mezcla de sincretismo religioso y herencia indígena.
Ceremonia y ciclo agrícola en Coatetelco
La comunidad de Coatetelco, tradicionalmente agrícola, considera que la ofrenda colgante también es el fruto de las cosechas y el trabajo del campo. En este contexto, la festividad del Día de Muertos es una celebración de los ciclos de la vida y la naturaleza.
La ceremonia inicia desde el 28 de septiembre, durante la festividad de San Miguel, con la "invitación" a los difuntos para que regresen al hogar el 1 y 2 de noviembre, porque los vivos celebran con los muertos, la abundancia de las cosechas, la buenaventura y generosidad de la tierra cultivada.
Además, las ofrendas de Coatetelco incluyen un detalle especial: se usan trastes de barro nuevos, ya que se cree que el barro puro tiene un significado de renovación y pureza.
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Para este fin, se organiza un mercado local en el que los artesanos venden utensilios de barro específicamente para los altares, lo que también ayuda a impulsar la economía local.
Recorridos y actividades para preservar la tradición
Con el objetivo de preservar y difundir esta tradición, el Centro Cultural “Mama Teo” organiza actividades y recorridos en Coatetelco. Por ello, este 31 de octubre y el 1 de noviembre, tanto locales como visitantes participan en un recorrido por los hogares que conservan la tradición de las ofrendas colgantes.
Estos recorridos, guiados por los residentes y organizadores, ayudan a los visitantes comprender, se primera mano, el significado de cada elemento de la ofrenda, además de involucrarse con el proceso de montaje, que comienza al mediodía y se completa al anochecer.
Las ofrendas se exponen en espacios públicos como el zócalo y la explanada del ayuntamiento.
¿Qué elementos llevan las ofrendas colgantes?
Cada uno de los elementos que componen las ofrendas colgantes de Coatetelco son:
- Agua, sal y velas: La purificación del alma y el camino que guía a los difuntos de regreso al mundo de los vivos.
- Pan, chocolate y tamales: Un símbolo de abundancia.
- Fruta de temporada (como mandarinas y guayabas): Son la generosidad de la naturaleza y el vínculo de la comunidad con el ciclo agrícola.
- Copal y cempasúchil: Elementos indispensables que guían el espíritu de regreso a casa.
Un detalle en este tipo de ofrendas es la presencia de doce platos de comida, cada uno representando un mes del año, en un acto de respeto y generosidad hacia los difuntos.
Una tradición que atrae a visitantes
Este año, una ofrenda colgante se montó en el Museo de Culturas Populares, en honor a "Mama Teo", como una forma de difundir esta costumbre en otras partes del país.
A través de estos esfuerzos, los organizadores y habitantes de Coatetelco buscan que esta tradición no se pierda y que las futuras generaciones comprendan y valoren la tradición.
Con información de Angelina Albarrán