En un hecho calificado como histórico por integrantes de las comunidades indígenas y de los pueblos originarios de Morelos, la gobernadora Margarita González Saravia firmó el decreto para la creación del Instituto dirigido a estos sectores de la población, con el cual la mandataria aseguró que se regresará a la hermandad, la comunidad y la solidaridad.
González Saravia señaló que la cristalización de este proyecto combate lo que últimamente se ha manejado como la "mentalidad conquistadora", la cual, dijo, tiene que ver con actos de corrupción, individualismo, avaricia, mentira, discriminación y la depredación de los recursos naturales.
“Tenemos que volver a la comunidad, a la solidaridad entre los pueblos, a la honestidad, a la hermandad, al humanismo, a la protección de nuestros recursos naturales, y los únicos que pueden lograrlo y llevarnos a ese camino son nuestros pueblos indígenas, nuestros pueblos afromexicanos y nuestros campesinos”, expresó González Saravia.
La gobernadora señaló que este Instituto para las Comunidades y Pueblos Indígenas y Afromexicanos tendrá el objetivo de reivindicar los derechos de las personas que conforman estos sectores en Morelos, las cuales por años estuvieron en el abandono.
“Este instituto no queremos que se burocratice, queremos que sea un instituto vivo en el corazón de nuestras comunidades, un instituto de territorio, que reivindique los derechos de nuestras comunidades, de los pueblos indígenas y afrodescendientes”, agregó.
Por su parte, Adelaida Marcelino Mateos, quien será la titular de este organismo descentralizado de la Secretaría de Bienestar, expuso que, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), en Morelos hay más de 532 mil habitantes en comunidades indígenas, mientras que existen 38 mil 331 personas afrodescendientes.
Señaló que en Morelos. las personas originarias representan un 25 por ciento de la población total, y a nivel nacional constituyen el 19.4 por ciento.
Por su parte, Saúl Roque Morales, de la Asamblea Permanente de Pueblos Originarios de Morelos, expuso que durante años han enfrentado descalificaciones y agresiones clasistas, además de la falta de respeto a sus derechos político-electorales para ocupar más espacios públicos, lo que les ha llevado a emprender nuevas luchas.