Como parte del Martes de Teatro se presentó en el Centro Cultural Teopanzolco la obra “Érase una vez la novia” del dramaturgo morelense Alejandro Román, con la compañía Sabaiba Teatro (Sinaloa), contando con el apoyo del Instituto Sinaloense de Cultura y de la Secretaría de Turismo y Cultura de Morelos.
Bajo la dirección de Lázaro Fernando Rodríguez, los actores y actrices que integran Sabaiba Teatro deleitaron al público morelense con una historia entrañable para Sinaloa, la cual está basada en el libro “El tesoro de la divina gracia” de Ulises Cisneros, quien narra los orígenes y la realidad de Guadalupe Leyva, mítico personaje conocido como “La Novia de Culiacán”.
Con un escenario totalmente en blanco, nos adentramos a la historia de Lupita, quien está en una cama de hospital psiquiátrico junto a un doctor y una enfermera; los recuerdos se apoderan de su memoria y vemos a una Lupita más joven contar su vida desde pequeña.
Ella se levanta de la cama, el doctor y la enfermera comienzan a hablar sobre la historia de esta mujer para contar la verdad. Y en escena inicia ese juego de historias donde Lupita joven y Lupita adulta, cuentan distintos pasajes de su vida; la cual fue muy dura, y muchos mitos se formaron a su alrededor.
A lo largo de la trama, vemos distintas anécdotas que nos llevan por las vivencias más felices, pero también más amargas de Guadalupe Leyva, hasta llegar a un punto donde se convirtió en una mujer sola que deambulaba por las calles de su amado Culiacán, vestida de blanco, para hacer un ritual de misa todos los días, durante 30 años, pues según ella, tenía una importante misión.
La obra se acompaña de música regional de Sinaloa y distintos elementos muy característicos de su cultura. Con el paso de la trama, también se vuelve una interesante metáfora por la transformación social que ha tenido Culiacán y por supuesto, gran parte de la República Mexicana, envuelta en olas de violencia. Definitivamente, “La novia de Culiacán” es un espejo, de cualquier ciudadano de México, que sufre por esta difícil situación.
Al culminar la función, Lázaro Fernando Rodríguez arribó al escenario para presentar a los actores que dieron vida a esta obra, Tania Mascareño, Héctor García, Lorena Fierro, David Zatarain y Xia Arellano, quienes encantaron al público por talento.
Lázaro Fernando se mostró muy agradecido con el público y con las autoridades que hicieron posible esta presentación. Asimismo, pidió un aplauso para Alejandro Román, uno de los dramaturgos más galardonados a nivel nacional e internacional, expresando que esta función fue muy especial, significando un reconocimiento a Alejandro al presentar su obra en su tierra natal.
Alejandro Román acompañó a los actores, actrices y al director sobre el escenario para recibir el aplauso del público, y expresar palabras de agradecimiento, para la compañía que ha hecho un excelente trabajo; y también para su público morelense que recibió muy bien esta puesta en escena.
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