La galería El Otro Mono, presenta la exposición “Una espiral al aire”, la cual cruza el mundo de las artes visuales con el de la palabra. En esta muestra, participan artistas y escritores que experimentan con el arte.
“Una espiral al aire” es el gesto a la palabra que se mueve en el espacio, la palabra como un acto místico, como un juego o como una experiencia estética. Esta exposición reúne piezas que abordan el gesto caligráfico, la poesía y la palabra presente para evocar la imagen.
“Con esta exposición tratamos de cruzar el mundo de la biblioteca que tenemos en la Cápsula Espacial con El Otro Mono. Un cruce entre la palabra y las artes visuales, para ver cómo la poesía o la literatura inciden en la producción de arte; entonces hicimos esta curaduría para hacer actividades que tienen que ver con estas disciplinas”, expresó Pedro Mantecón.
En la exposición participan Kenia Cano, Eduardo Olbés, Aldebarán Solares, Balam Bartomé, Elvia González, Selva Hernández Gaby Lobato, Pericles Lavat, Luis Verdejo, Jorge Rosano Gamboa, René Escoto, Marcos Límenes, Rodulfo Bartolomé Robledo, Fernanda Montoya y Ana Paula Castro.
Cabe destacar que para esta exposición, no hubo una convocatoria, fue un proceso de selección de obra que los directores de El Otro Mono realizaron a lo largo de los meses, con artistas que trabajan con la palabra, y escritores y editores que trabajan con la imagen.
“La selección es muy afortunada, se siente que todo está en diálogo y que hay una cierta atmósfera de color que la envuelve”.
María Ramos, cofundadora de El Otro Mono, comentó “Una de las particularidades de la exposición es que al igual como se exponen obras que tienen ese cruce entre la palabra o el gesto caligráfico presente en la pintura o en la escultura, están también expuestos varios libros como el libro de poesía de Kenia Cano”.
Otras de las piezas que podemos ver en la exposición, está la de Selva Hernández, escritora y editora, quien nunca había expuesto como artista, y en esta exposición nos muestra la pieza “Homenaje a los libros caídos I y II”, donde reúne las tapas de varios libros que no pudo recuperar durante el temblor.
Asimismo, Selva realiza una investigación de las librería de viejo en Ciudad de México, donde podemos encontrar librerías de hace más de cien años, que acompañan muy bien a la pieza.
“En la exposición está representada la palabra escrita, la palabra hablada, y también la lectura de las personas, por ejemplo están también las piezas de Marcos Límenes, que hablan de la pitiriasis, una enfermedad que tuvo en la piel y cómo esa enfermedad que él tenía con los doctores y con su mismo cuerpo al ver la piel roja llena de machas o de marcas, se insinúa como la forma de leer al otro, de leer el cuerpo del otro, es decir, el acto de la lectura no sólo de leer palabras, sino de interpretar y vernos entre nosotros, leer colores y formas”, dijo María Ramos.
Otras de las piezas son las del escultor filipino Eduardo Olbés, destacando la obra “Glifo de la palabra”.
“En esa pieza Eduardo Olbés hace referencia al signo de la palabra, y justamente el título de la exposición, tiene que ver con esos signos, que son la representación del canto, la poesía y la lengua para los mayas por ejemplo, por eso decidimos que nombrarla Una espiral al aire”, detalló Pedro Mantecón.
En el marco de esta exposición, se han realizado diversas actividades, una de ellas fue previa a la apertura de la muestra, y se trató de una lectura de poesía en la sala Gabriel Figueroa del Cine Morelos.
“Fue una lectura de poemas plásticos moderado por Kenia Cano, donde estuvieron presentes Vicente Quitarte, Elsa Cross, Hernán Bravo Varela, Jorge Esquinca y Ursus Sartori”.
Posteriormente, la bailarina Bereniz Pantle realizó una interpretación de las piezas con danza continua dentro de la galería, interactuando cerca de las piezas.
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