Una de las voces más encantadoras y lúdicas de la radio es, sin duda alguna, la de Patricia Godínez. Cuando la escuché por primera vez en la radio, confundí su suave voz con la de Sofía Álvarez, aquella maravillosa actriz cuentacuentos que hacía volar la imaginación de los niños que la veían de lunes a viernes en el canal 11 de la CDMX.
Gracias a los distintos gustos de sus padres, Patricia siempre tuvo a su disposición diferentes tipos de música y literatura que detonaron su gusto en ambas expresiones artísticas. Cuando comenzó a “consumir” su propia música, como ella dice, decidió empezar a trabajar para ejercer su libertad de compra y adquirir sus propios discos con una suerte de melomanía intrínseca, además de comprar sus revistas especializadas que tanto ama, logrando su gran acervo que tiene todavía.
Patricia vino de la CDMX en 1998 y ha sido conductora titular y productora de contenido de programas de Radio en Cuernavaca desde 1999: Radica, Best FM, Radiológico, Rock 101 así como conductora y productora de programas de televisión DGRyTv. Desde 2006 es productora audiovisual en videos diversos y proyectos de corte cinematográfico. Actualmente conduce y produce el programa Ecos y es locutora titular del programa Dimensión Cultural, en Radio UAEM 106.1 FM, Cuernavaca, a la cual llegó por una invitación.
“Ecos” es el título de su programa de radio; le surgió la idea de este nombre a partir de la mitología griega en donde “Eco”, era la ninfa condenada a repetir lo que los demás decían y eso es exactamente lo que hace un comunicado, el repetir lo que alguien dice como un eco, abriendo espacios para que otros hablen y también haciendo un poco el trabajo de traducción para poder aterrizar la jerga especializada de los que se presentan, como el caso de los científicos, por ejemplo.
Es de llamar la atención la música que reproduce en sus programas; ahí se puede apreciar el extenuante trabajo de curaduría que ha hecho a través de los años aunque, desafortunadamente, ha perdido algunos discos a través del tiempo. También llama la atención su gran acercamiento con diferentes bandas de rock que parecería que las conoce a todas. “Esto no es trabajo fácil, en lo absoluto, dice Patricia con su acostumbrada sonrisa. “hoy día levantas una piedra y sale una banda de rock, amerita mucho trabajo de investigación”.
Los temas que más le interesan son de cultura, artes, derechos humanos, ciencia y derechos de las mujeres
Se proclamó feminista hace relativamente poco tiempo al escuchar los diferentes discursos de Elena de Hoyos, Ivonne Velazco, Alma Karla Sandoval, Denisse Buendía y otras pensadoras. Fue a partir de todos estos planteamientos que se dio cuenta de las grandes diferencias que existen en el actuar del mundo femenino y el mundo masculino en su propio ambiente, porque si bien las voces no compiten necesariamente en su entorno laboral, sí compiten en términos de producción, aunque ella asume que su responsabilidad es compartir la información y el efecto que pueda tener con su audiencia.
Aunque ya es una feminista declarada, Patricia opina que es muy arriesgado apoyar a mujeres por el sólo hecho de serlo y no le sería posible apoyar el ejercicio político de algunas personajas de la actualidad. Ella no busca el “igualismo” entre las facciones feministas, sino la capacidad de los valores, el bagaje cultural y los alcances éticos.
Hoy día, se siente muy complacida al trabajar con personas visionarias, profesionales y abiertas a nuevas propuestas y espera que esta sea la puerta para hacer otros proyectos más grandes que contribuyan a su crecimiento personal. Por lo pronto, a ella le gusta el camino a donde se dirige su carrera aunque no piensa demasiado en el futuro, salvo en términos muy prácticos. No piensa en la trascendencia, no sabe si lo que está haciendo será digno de recordarse, no ambiciona poder ni riquezas sino en lo paupérrima que va ser su pensión cuando sea viejita, (me dice soltando una enorme carcajada). Patricia se siente, usando sus propias palabras, un tanto cuanto indignada por el dinero que tomaron de sus impuestos para hacer un aeropuerto que ya no se va a construir y además, no siente que habrá cambios significativos en este panorama desolador de visión de futuro.
Del trabajo artístico-plástico de las mujeres a ella le gusta Remedios Varo y Leonora Carrington particularmente. En la escritura, le gustan Rosario Castellanos e Isabel Allende por mencionar sólo algunas. Rosario Castellanos le gusta en particular por su capacidad de síntesis, por su amplia narrativa en la que puede contextualizar a sus personajes que tienen una gran universalidad y que el lector o lectora logran empatizar con lo que ella plantea. Por otro lado opina que se deberían seguir abriendo espacios en el quehacer cultural para rescatar a las mujeres en la historia.
Así mismo, considera que en Morelos falta disposición de las propias mujeres para darse la oportunidad a una mejor calidad de vida; es decir, hay un sector de mujeres muy sensibilizadas que quieren cambiar su realidad y otras que no se han dado cuenta aún, porque encontraron la comodidad en su incomodidad. Muchas mujeres repelen la palabra feminismo como si fueran cómplices en lo eterno de la opresión y hay una gran distancia entre las ideas y las personas.
Por lo pronto, si queremos tener una hora de comentarios interesantes y divertidos, no se pierdan su programa de lunes a viernes de 5 a 6 de la tarde en el 106.1 de UAEM.