En el museo regional Cuauhnáhuac este viernes se inauguró la exposición temporal "Ofrendas en las pilas", un sitio arqueológico, con el mismo nombre y que se localiza en Jonacatepec, al oriente del estado. Se caracteriza por por haber sido un centro ceremonial cuyo desarrollo y decadencia ocurrió entre los años 200 a.c y 650 d.c.
Estuvo ligada a la expansión de Teotihuacan, y las excavaciones arqueológicas fueron realizadas entre 1973 y 1980, dejando al descubierto basamentos piramidales después destruidos por otros grupos prehispánicos como los aztecas.
Este evento forma parta de las actividades que realiza el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por su 80 aniversario, y en este marco se inauguró la exposición que consta de vasijas como Tlaloc, representado por sus grandes colmillos y ojos saltones.
En el museo también se puede apreciar la vasija florero, cuya forma, acabo y decoración definen el nivel social de las personas muertas. En la pieza las líneas representan los pétalos de una flor.
En esta exhibición un cajete llama la atención de los presentes, ya que el color naranja de la arcilla y la decoración son los rasgos principales que lo distinguen a un tipo de cerámica de Teotihuacan. Este contenedor servía para guardar alimentos que ayudaban a las almas en su camino al mundo de los muertos.