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En una jornada de llena de espiritualidad y conexión con la naturaleza, la comunidad indígena de Tetelpa llevó a cabo por primera vez la Ceremonia Prehispánica de iniciación sacerdotal "La entrega de la sagrada ofrenda de fuego".
Este ritual ancestral, realizado en el cerro de la Tortuga, marcó el nombramiento de Gisela Núñez Alemán como la nueva sahumadora del pueblo de Tetelpa.
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¿Por qué es importante esta ceremonia?
A decir del ayudante municipal Sócrates Arellano Anuales, esta actividad tiene como objetivo revivir y preservar las costumbres ancestrales que han sido olvidadas con el paso del tiempo y la influencia de la modernidad.
Es un trabajo conjunto de varias comunidades indígenas, un esfuerzo por rescatar nuestras tradiciones y costumbres
Pueblos hermanos se unen a la celebración
La ceremonia contó con el respaldo de los Guardianes de los Lugares Sagrados de Alpuyeca y representantes de Anenecuilco, Xoxocotla, Tetlama, y Zapata, quienes se unieron como pueblos hermanos para apoyar esta iniciativa.
La nueva sahumadora, Gisela Núñez Alemán, recibió este honor y responsabilidad tras ser reconocida por las tatas y nanas de las comunidades participantes.
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¿Qué incluyó la ceremonia?
La Sagrada Ofrenda de Fuego incluyó elementos tradicionales como el popoxcomil, incienso, sahumerio, frutas, comida típica en vasijas de barro, y collares de cempasúchil.
La ceremonia, descrita como un acto sublime y divino, representa la cosmovisión de los pueblos indígenas, quienes honran a los elementos de la naturaleza y los cuatro puntos cardinales.
Se trata de compartir los poderes supremos como algo sublime, algo divino de la cosmovisión de los pueblos ordinarios, para esto se prepara una ofrenda con los materiales necesarios como el popoxcomil, el fuego, el incienso, el sahumerio, frutas comida típica y obviamente en vasijas de barro y flores, los rosarios y collares de cempasúchil, se trata de tema muy solemne.
Maurilio González Pantitlán, líder comunitario, explicó que esta ceremonia abrirá una nueva era en el liderazgo espiritual de Tetelpa, ya que Gisela se ha preparado para continuar con el legado ancestral de los antepasados.
En Alpuyeca tenemos 20 años que se levantó el cargo que me enmendaron a mí, ahora ella va a ser nueva representante en Tetelpa, ya reconocida y aprobada por el pueblo
