Jorge es vecino de Cuernavaca. Desde hace varios años realiza malabares con un par de machetes y un balón de futbol en los cruceros de la capital del estado. Con lo que logra recolectar, sumado a su trabajo como personal de mantenimiento, ha podido sostener a su familia.
“Hago poco de malabar, ya llevo años en esto y esto es más que nada complementario porque tengo mi trabajo en mantenimiento, pero ya ves, las cosas no están tan fáciles, entonces vengo un rato en la mañana y otro en la tarde. Me pongo aquí en el semáforo y me pongo a hacer lo que me gusta”.
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El cruce de las avenidas Paseo del Conquistador y Vicente Guerrero, al norte de la ciudad, es uno de sus lugares favoritos para desarrollar esta actividad, donde en los días buenos logra recolectar hasta 280 pesos, poco más del salario mínimo en México, que es de 248.94 pesos, en dos turnos, de 8:00 a 10:00 de la mañana y unas horas más por las tardes.
“Va variando, de repente en la mañana en una hora u hora y media, me saco 100 pesos o 130 y en la tarde otros 150 y así no la llevamos. Hay días que de repente están buenos, otros que no están tan buenos, pero ya se complementa con mi salario”.
La necesidad de sacar adelante a su familia fue lo que llevó a realizar esta actividad, que en principio fue el único ingreso para llevar sustento a casa, dijo.
“Por dos años o tres estuve aquí trabajando en los malabares y gracias a Dios sí estábamos sacando adelante a la familia, a lo mejor no como uno quisiera, pero la verdad es que no nos va mal”.
Cuestionado del porqué elegir un balón y machetes para hacer su acto en el crucero, mencionó que desde chico le gustó el futbol y era bueno para las dominadas, por lo que emprendió así y posteriormente agregó los machetes.
Mencionó que con estos instrumentos es con los que le va mejor, pues llaman más la atención de la gente.
“Desde chico me gustó el fútbol, yo era portero como cinco años estuve jugando fútbol rápido en el DF (CDMX) y más o menos dominaba el balón y hace como siete años empecé hacer estos y pues ya se me ocurrió combinarlo; le gusta a la gente porque cuando saco otros juguetes no me va igual, con el machete y el balón es cuando me va mejor”.
Agradeció a quienes le dan una moneda cuando pasan por ahí, pues indicó que ante estos difíciles tiempos se valora más una ayuda de este tipo.
“Muchas gracias a la gente que coopera y a la que no coopera también porque todo está muy caro y ya el hecho de que te regalen una moneda pues ya se agradece”.