El clima de Cuernavaca no sería posible sin sus barrancas. En el noroeste hay pequeñas y grandes depresiones que le dan vida a la capital de Morelos.
Muchas personas asocian las barrancas con la contaminación y las inundaciones durante la época de lluvias, pero la realidad es que las barrancas dan vitalidad a nuestro entorno; de ahí la urgencia de revalorarlas.
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Pero bueno, mientras se buscan planes eficientes para ello, aquí te comparto cinco cosas que te puedes encontrar durante la época de lluvias si te animas a hacer senderismo por alguna de las casi 50 barrancas de Cuernavaca.
Ganado
En la zona rural de Cuernavaca aún es común encontrarse con ganado suelto pastando en los verdes campos que acompañan las barrancas de la ciudad.
El ganado suele ser tranquilo, y se recomienda no acercarse ni molestarlo.
Agua zarca
El agua naciente en los cerros no siempre es cien por ciento cristalina.
En el norponiente de Cuernavaca, donde brotan los manantiales que descienden por las barrancas, es común que en época de lluvias se formen pozas de agua zarca con tonalidades blanquecinas y café.
Esto se debe a la presencia de partículas de hierro, óxido de calcio y otros minerales.
Saltamontes perezosos
En Cuernavaca, con la época de lluvias, los árboles que conforman la zona boscosa reverdecen junto con su suelo.
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Este ecosistema crea el entorno perfecto para la llegada de insectos, como los saltamontes perezosos.
A pesar de su imagen atemorizante, no son peligrosos. Se alimentan de plantas y se mueven de forma gregaria.
Malaquita
Las mariposas amarillas con motas oscuras son siproeta stelenes, comúnmente conocidas como "malaquitas".
Si paseas por las barrancas de Cuernavaca, será muy común encontrarlas durante toda tu travesía.
Moyotes
Hace años, ver los escarabajos verdes, cotinis mutabilis, era muy común en casi toda Cuernavaca, pero ahora, con el crecimiento de la mancha urbana, suelen verse cada vez con menos frecuencia.
Sin embargo, por obvias razones, eso no ocurre en la zona rural de Cuernavaca.
Los escarabajos verdes, mejor conocidos como moyotes, son polinizadores y parte necesaria del entorno.
Como verás, esto es solo una pequeña muestra de toda la vida que se esconde en las barrancas de Cuernavaca y por lo que debemos actuar para preservarla.