Hace un par de semanas, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) dio a conocer que de acuerdo a un estudio, las sopas instantáneas tienen un alto contenido de sodio, alto nivel calórico y muy bajo aporte nutrimental, por lo que algunas marcas podrían ser retiradas del mercado.
De acuerdo con la Asociación Mundial de Fideos Instantáneos (WINA, por sus siglas en inglés), en México ha ido en aumento el consumo de sopa instantánea, pues en 2016 en México se consumieron 890 millones de unidades de sopas instantáneas, y desde entonces la cifra ha aumentado más del 20 por ciento, ya que en 2020, el consumo de estos productos fue de mil 160 millones de unidades. Con esa cifra, México se ubicó como el segundo país de Latinoamérica que más sopa instantánea consume, únicamente detrás de Brasil. Y el número 15 a nivel mundial, de acuerdo a un estudio publicado en la Revista del Consumidor.
El que algunas sopas instantáneas desaparezcan es una situación que le pega especialmente a estudiantes universitarios y trabajadores de oficina, quienes son los principales consumidores por el bajo costo que tienen y la rapidez que implica su preparación.
Definitivamente siempre habrá mejores opciones y alternativas para alimentarse, los puestos de comida rápida en las calles son los mejores aliados en este caso, que aunque pudiera tampoco ser lo más sano, tendrá un aporte mayor al cuerpo humano que una sopa instantánea.
Cerca de la casa u oficina, seguro siempre habrá algún puesto de comida, entre los más populares, el de garnachas donde puedes degustar quesadillas, gorditas, huaraches y sopes.
Otra alternativa son los tacos acorazados por la variedad de deliciosas opciones con las que puedes acompañar ese taco de doble tortilla y su cama de arroz rojo, acompañado por algún guisado.
También podemos encontrar los famosos tacos de canasta, que por 25 o 35 pesos puedes disfrutar entre cinco y ocho tacos.
Asimismo, hay diversas opciones en loncherías y fondas donde encontramos gran variedad de comidas completas, con ese toque casero.
La mayoría de los mexicanos hemos consumido una sopa instantánea en algún momento para matar el hambre o por simple antojo; sin embargo, en la actualidad muchas personas continúan trabajando o tomando clases desde casa, y definitivamente la mejor opción siempre será la comida hecha en casa, ya que será más barato comprar despensa para la semana completa.