Bajo el lema de "abrir o morir", empresarios de eventos conocidos como de la industria de romance, exigen a las autoridades estatales que los dejen trabajar, poniendo en claro que cumplen con todas las medidas sanitarias, pues se han perdido más de 100 mil empleos, ya que más de 46 mil eventos se han pospuesto o cancelado, dejando de percibir el estado una derrama económica de más de ocho mil 424 millones de pesos, en perjuicio de todo el sector turístico.
En voz de Néstor Figueroa y Angélica Jaramillo, los empresarios de este sector insistieron en que por lo menos hay en Morelos 900 jardines y salones de eventos con áreas abiertas en las que se pueden realizar bodas, XV años y demás festejos con todas las normas sanitarias.
Lo anterior luego de que la tarde del martes el secretario de Turismo Federal, Miguel Torruco, solicitó a nivel federal que la Secretaría de Salud y la de Economía consideren al turismo como una actividad esencial por la importancia que tiene en la economía del país, pues representa el 8.7 del Producto Interno Bruto, fue la tercera fuente de ingreso de divisas para el país con 24 mil 573 millones de dólares, todo ello antes de la pandemia, por lo que destacaron los empresarios morelenses que es necesario que a nivel estatal se haga lo mismo.
Destacaron que de septiembre a diciembre, que les permitieron trabajar parcialmente, no tienen ningún contagio reportado en sus eventos, por lo que recalcaron que su sector no representa ningún foco de infección.
Urgieron a las autoridades de Salud estatal y de Protección Civil del estado, y de los municipios, donde hay empresas y jardines para eventos, a reunirse para definir la estrategia que les permita reactivarse porque de lo contrario van a colapsar y desaparecer, y esto sería muy perjudicial para la economía estatal.