A tres días de la cena de Nochebuena y cuatro de la Navidad, las plazas comerciales y los bancos han cobrado vida gracias a las personas que acuden a hacer sus compras de la temporada y que hacen largas filas en los cajeros para retirar el dinero que gastarán, como pudimos constatar este martes en un recorrido realizado en las principales plazas del municipio, así como las sucursales bancarias que se encuentran en el Centro Histórico.
“Es mejor comprar ahorita que dejarlo para el último. Ahorita lo hacemos con calma y sin largas esperas”, opinó Sergio Méndez, habitante del municipio que acudió desde la mañana a comprar sus regalos de Navidad en Plaza Los Atrios, el complejo comercial ubicado en la zona norte del municipio. Ropa, juguetes, un par de zapatos y un cinturón (según relató) fueron los artículos que se encontraban envueltos entre sus brazos.
Aunque al interior de los principales establecimientos de la plaza no había filas, al mediodía el estacionamiento se encontraba lleno. De acuerdo con el personal del lugar, se espera que en los próximos días la plaza se sature. Además, mucha gente acude a hacer sus compras por la tarde y la noche, una vez que concluye el horario de oficina.
Las ventas de la temporada navideña, que incluyen los regalos que se entregan el 25 de diciembre, pero también los ingredientes e insumos para la cena de Nochebuena, no sólo se traducen en mayores ingresos para las tiendas departamentales, sino que además benefician al transporte público. En la calle, los conductores de las unidades con itinerario fijo (combis) agradecen que estas fechas lleven a que más gente se traslade a los comercios en unidades públicas.
“Para nosotros es buena temporada, porque la gente está saliendo más”, cuenta un conductor.
En medio de la pandemia, la posibilidad de hacer compras sin tener que salir de casa es una opción que ofrece seguridad sanitaria y elimina por completo los riesgos de contagio. A la hora de cuidar de la salud, plataformas como Amazon Compras y Mercado Libre ofrecen la posibilidad de hacer pedidos con pagos en línea y recibiendo los productos en casa. De acuerdo con el Institute for Business Value de 2021, el 88 por ciento de los consumidores encuestados tiene pensado hacer compras en esta temporada, de los cuales el 38 por ciento planeaba hacerlo en línea.
Y aunque comprar en línea no supone un riesgo a la salud, estas transacciones no están exentas de otros peligros. Por ello, lo mejor es hacer a través de sitios seguros, usar tarjetas digitales y tener cuidado con los correos electrónicos de seguimiento de paquetes inesperados, entre otras medidas.
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