Este domingo, como tantos otros, en el mercado Adolfo López Mateos, donde cálculos conservadores estiman que poco más de cinco mil personas, entre introductores, comerciantes y compradores, acudieron a realizar sus compras sin mayor complicación y sin cumplir con las mínimas normas de sanidad impuestas por las autoridades ante la contingencia por el covid-19. Mientras tanto, autoridades de Protección Civil afirman que "el ALM es un foco de infección latente".
Lo mismo entre los andenes que dentro de la nave principal del mercado, los comerciantes ofrecen sus productos entre filas de personas que se trasladan de un lugar a otro o mientras esperan abordar un taxi, una ruta o un camión, y a muy pocos se ven que lleven puesto un cubrebocas.
Ante esta situación, autoridades de la subsecretaría de Protección Civil de Cuernavaca, a cargo de Gonzalo Barquín Granados, expuso que ya se notificó a los locatarios y comerciantes del ALM, y de nueva cuenta lo harían este domingo, pues recalcó "es un foco de contagio latente por toda la gente de otras partes que acuden a realizar sus actividades, pero no entienden; tal vez quieren que como en otros países, ver los cadáveres tirados en la calle para que cierren sus negocios".
En el recorrido realizado este domingo, solo algunos comerciantes tienen gel antibacterial para sus clientes, pero nadie se preocupa por mantener la distancia mínima indicada por las autoridades.
"No podemos quedarnos en casa, si no trabajamos no comemos y nosotros que vendemos productos perecederos ¿dónde los guardamos? los tendríamos que tirar y nos quedaríamos sin capital", argumentaron los comerciantes ante esta situación.