El sector ganadero en Morelos sufrió la falta de apoyos durante el actual sexenio, especialmente para el mejoramiento genético, dice Roberto Reza Quiroz, presidente de la Unión de Ganaderos de Tlaquiltenango. Lamentó que desaparecieran programas federales y que los municipios limitaran el presupuesto para el sector agropecuario. “No hubo apoyos, tanto en el gobierno federal, como en el estatal y municipal fueron muy básicos”, reconoce.

Dijo que en el Estado el presupuesto para el desarrollo agropecuario fue mínimo, “apenas para justificar las operaciones de la robustecida secretaría, donde hubo más cambios de titulares que resultados o recursos”. En el caso de los municipios, como Tlaquiltenango, dijo que solo se manejaron recursos del Fondo de Aportaciones Estatales para el Desarrollo Económico (Faede).

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Respecto al Faede, aseguró, “se convirtió en la caja chica de algunas autoridades municipales y fueron dando solo migajas de apoyo al campo”. Y como ejemplo, dijo, compraron semillas caducadas, lo que representa grandes pérdidas para el sector, además acusó que la compra de ganado fue ficticia.

Exhortó a las autoridades correspondientes a auditar a la Sedagro para conocer sobre las supuestas irregularidades y condiciones anómalas que se presentan al interior de la dependencia.

Los productores estamos solos, pero seguimos produciendo, seguimos trabajando y así seguiremos con apoyo o sin apoyo, y si viniera un apoyo al sector esto se levantaría y cambiaría el estatus ganadero y agrícola del estado de Morelos.

Reconoció que existen grandes expectativas en la gobernadora electa, Margarita González Saravia, quien ha dicho que se le va a invertir al campo más de 700 millones de pesos; “desde aquí hacemos el llamado que tomen en cuenta los ganaderos, que urge que se implementen buenos apoyos para la ganadería para mejorar el hato ganadero con un mejoramiento genético”.