Durante 2023, cinco de cada 10 mexicanos aseguraron ser víctimas de acoso a través de alguna aplicación espía instalada en su celular por su pareja o una persona cercana, indicó la empresa de ciberseguridad Kaspersky.
De acuerdo con el estudio El estado del stalkerware 2023, la firma tecnológica encuestó a más de 20 mil usuarios a nivel mundial para detectar el uso de estas apps que se disfrazan como de control parental, pero en realidad se usan para espiar y vigilar a otra persona.
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“Contrario a las apps de control parental, que son herramientas para padres preocupados por la seguridad en línea de sus hijos, las stalkerware se instalan sin el consentimiento de la víctima y ofrecen un control de sus fotos, movimientos bancarios o hasta de sus conversaciones”, afirmó Judith Tapia, gerente de producto para el consumidor para México en Kaspersky.
Olimpia Coral, impulsora de la Ley Olimpia, la cuál castiga y tipifica la violencia digital, especialmente la difusión de imágenes íntimas, compartió que una víctima descubre que tiene instalada una app de espionaje hasta que su información es compartida sin su consentimiento.
“Este tipo de acoso digital tiene impactos psicológicos, físicos y hasta económicos. Las víctimas se sienten perseguidas, se sienten vulnerables con su información y todo eso repercute en su salud mental”, compartió Coral a El Sol de México.
La activista y defensora de espacios digitales destacó que a pesar de la existencia de legislaciones como la misma Ley Olimpia, aún persisten desafíos en el acceso a la justicia en entornos digitales.
“Es necesario comprender que los perpetradores de acoso y violencia digital se están profesionalizando en el uso de la tecnología para controlar a las mujeres.
Aún se requieren medidas adicionales para abordar efectivamente la violencia digital y garantizar la protección y el acceso a la justicia para las víctimas”, agregó.
Este tipo de apps funciona en segundo plano en los dispositivos, es decir, que las personas afectadas ignoran por completo que su actividad digital está siendo monitoreada. Para su instalación, los victimarios instalan la app en el teléfono de la víctima sin que ellos se den cuenta.
El informe de Kaspersky encontró que las parejas son las que más usan este tipo de aplicaciones, pero con una tendencia más marcada de usarse contra las mujeres.
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“Si bien 34 por ciento están de acuerdo con espiar a su pareja, sólo 10 por ciento confesó haber instalado alguna aplicación o haber realizado alguna configuración que les permitiera tener acceso al dispositivo de su pareja”, agregó Tapia.
Según Kaspersky, el número de personas afectadas por estas apps creció casi seis por ciento el último año. A nivel regional, México es el segundo país donde más casos de espionaje se han identificado, sólo por detrás de Brasil.