Tras haber cancelado dos conciertos en México por un golpe en el ojo derecho provocado por una caída, Joaquín Sabina retomó en el Auditorio Nacional la gira de promoción de su disco Lo niego todo.
Lo hizo en medio del escenario y vistiendo unos lentes oscuros para tapar el golpe, pues a pesar de todo el cantante no quería quedarse en cama y perderse este concierto en un lugar que considera su casa.
“Una noche en San Luis Potosí tuve una especie de mareo y me di un golpe con una puerta. Juro que solo llevaba dos tequilas”, bromeó el cantante para desatar algunas risas y aplausos.
Acompañado de seis músicos y una corista, el cantautor que recién cumplió 69 años el 12 de febrero abrió la velada con temas de su nuevo disco como "Quién más, quién menos", "No tan de prisa", "Lágrimas de mármol", “Sin pena ni gloria” y “Lo niego todo”, la cual da nombre al material.
El cantante español no dudó en compartir su cariño por México, e incluso lo defendió del “mentecato emperador del norte”, haciendo referencia a Donald Trump, a quien insultó en varias ocasiones, y su idea de construir un muro en la frontera.
“Sepan ustedes que si eso llega a suceder tengo muy claro de qué lado de la frontera me quedaré", dijo ante el estruendoso aplauso del público para después interpretar “Por el bulevar de los sueños rotos”, donde también rindió homenaje a Chavela Vargas y José Alfredo Jiménez y concluyó con un grito de “¡Viva México, cabrones”.
“Peces de ciudad”, “Una canción para la Magdalena”, “Y nos dieron las diez” y “Noches de boda” fueron algunos de los temas que aderezaron el oído de los 10 mil asistentes que se dieron cita.
El cantante continuará su gira por Centroamérica y después viajará a España, donde concluirá sus conciertos en junio próximo.