La Comisión Estatal del Agua de Morelos, encabezada por Jaime Juárez López, informó que la dirección de los vientos desvía la caída de ceniza del volcán Popocatépetl hacia otros estados, por lo que en Morelos no hay afectaciones en los cuerpos de agua ni riesgos para la salud.
Según explicó el titular de la dependencia, solo el municipio de Hueyapan, al suroeste del estado, percibió cantidades mínimas de ceniza. Sin embargo, no hubo preocupación por la salud de los habitantes debido a la inexistencia de agua contaminada, ya que la ceniza volcánica contiene minerales y otros componentes que podrían representar un riesgo si se mezclan con el agua y se ingieren. Hasta el momento, los informes sobre la actividad volcánica en Morelos indican que no hay contaminación activa del agua.
"En ese lugar no tenemos fuentes superficiales de agua, por lo que aún no representa un riesgo", señaló Juárez López.
Dado que la actividad del volcán es impredecible, la Comisión Estatal del Agua se mantiene en monitoreo constante para atender cualquier emergencia relacionada con los cuerpos de agua en el estado.
Es importante recordar que la laguna El Rodeo, ubicada en el municipio de Miacatlán, es el cuerpo de agua más relevante en Morelos, con una capacidad de almacenamiento máximo de 18,000 metros cúbicos.
Ante la presencia de ceniza volcánica, se recomienda mantener los depósitos de agua tapados y retirarla de cualquier espacio en la vivienda. La ceniza es un material pesado, y una capa de tres centímetros en un metro cuadrado puede llegar a pesar aproximadamente 50 kilos. Acumularla en techos y láminas puede representar un riesgo para el patrimonio y la población.
Para limpiar el área de la ceniza, se aconseja barrerla después de cubrir la nariz y la boca con un pañuelo húmedo o un cubrebocas, ya que el contacto con la piel y las vías respiratorias puede ser perjudicial para la salud.
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