La fiesta patronal dedicada a San Miguel Arcángel en el poblado de Acapantzingo en Cuernavaca, se lleva a cabo con gran participación y fervor de los fieles creyentes.
Después de no haberse podido realizar con la presencia del público debido a la pandemia por el Covid-19, este 29 de septiembre más de 300 personas se dieron cita en la parroquia de San Miguel Acapantzingo durante el día para venerar a su santo patrono.
El templo fue construido en 1582 por lo que son ya casi 500 años de existencia, surgió como una hacienda de Maximiliano de Habsburgo y fue desde ese momento que se empezó a celebrar a San Miguel de Arcángel, por lo que representa toda una tradición para quienes viven en esta zona de la ciudad.
Con imágenes y representantes de el ángel, personas de diferentes puntos del estado acudieron a la parroquia para recibir la bendición, tal es el caso de Carlos y Juan Flores quiénes desde muy temprana hora acudieron a los festejos, ya que en su municipio Temixco no encontraron celebraciones de San Miguel.
El señor Juan dijo que era creyente desde hace muchos años y que es la primera vez que se une a la ceremonia en la capital morelense, al preguntarle por qué es devoto respondió que "San Miguel es quién va a librar todas sus batallas. Se siente bonito estar y caminar con él".
Familias enteras llegaron a la pequeña feria que se colocó a las afueras de la parroquia, para además de presenciar los actos litúrgicos, disfrutar un momento de sana convivencia.
La celebración continuó al compás del brinco del chinelo, las comparsas salieron desde la calle 5 de febrero para acompañar la imagen de San Miguel hacia la parroquia.
Para próximas celebraciones, el señor Fermín Morales, uno de los lugareños, invitó no solo a los morelenses a participar en las fiestas patronales, sino a todos los mexicanos, que se animen a venir, pues dijo "es un pueblo de tradiciones y ustedes bien saben que un pueblo sin tradiciones, es un pueblo sin identidad. Aquí tienen las puertas abiertas, somos hospitalarios al 100%" , señaló.
Los pobladores señalaron que junto a esta festividad se venden las cruces de pericón, puesto que desde el 28 de septiembre "se suelta el mal", por lo que las cruces son colocadas en las puertas de negocios, hogares e incluso vehículos para alejar a todos los males.
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