El rechazo de diputados locales por evitar que continúen los militares en las calles hasta 2028, a propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador, es un asunto con trasfondo político en perjuicio de los municipios que gobiernan; “al rato que no se quejen de la inseguridad”, afirmó el gobernador del estado de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo.
El mandatario estatal recordó que alcaldes como el de Cuernavaca, Huitzilac, Emiliano Zapata, Tetecala han solicitado la presencia del Ejército y la Guardia Nacional en apoyo a sus localidades; “yo creo que era fundamental que nos apoyáramos con ellos, con la Guardia Nacional, pero, bueno, es una cosa política del PRI y del PAN; al rato que sus presidentes municipales ni ellos se quejen de que no hay seguridad”, destacó.
El mantener las fuerzas castrenses en las calles ha sido una solicitud constante por parte del alcalde de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, para inhibir los delitos de alto impacto, manifestó.
“Pero ustedes vieron sus diputados del PAN no quieren; al rato que no se quejen de la inseguridad”, dijo al señalar que como gobierno continuarán con el apoyo solicitado por los alcaldes, “sin ver de qué partido sea”.
La negativa de los diputados locales a la militarización de la seguridad, dijo que deja mal parado al estado porque es donde los presidentes municipales opositores al actual gobierno quienes piden el apoyo de los militares en las calles.
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