Habitantes de la comunidad de Amilcingo, en el municipio de Temoac, confirmaron que este año, al igual que los últimos, el centro de la localidad será iluminado con el “árbol de la resistencia”, un pino que es encendido durante la temporada navideña y que, además de buscar despertar el espíritu de unión en la comunidad, también aspira a convertirse en un mensaje de resistencia, particularmente hacia los megaproyectos del gobierno federal.
De acuerdo con Jorge Velázquez Escalvazeta, el encendido del árbol se llevará a cabo este 12 de diciembre en un evento sociocultural que dará inicio a las 18:00 horas, en el que participarán la Escuela Normal Rural “Carmen Serdán”, de la localidad de Tételes de Ávila, en Puebla; así como la Escuela Normal Rural “Emiliano Zapata”, del propio Amilcingo.
En las últimas décadas, la comunidad de Amilcingo se ha caracterizado por su participación en la defensa de los recursos naturales y particularmente por la oposición a la operación de la planta termoeléctrica de Huexca, su acueducto y gasoducto. En 2019, el encendido del árbol cobró un sentido más emotivo, pues éste fue dedicado a la memoria del activista Samir Flores Soberanes, uno de los principales opositores al Proyecto Integral Morelos (PIM), que fuera asesinado el 20 de febrero de ese año al salir de su casa, durante la madrugada.
Respecto a su asesinato, los habitantes de la comunidad siguen solicitando que la investigación sea atraída por la Fiscalía General de la República, ante la falta de presentación de resultados por parte de la Fiscalía General del Estado, toda vez que su titular, Uriel Carmona Gándara, ha asegurado que existen avances importantes relacionados con el caso.
El movimiento “Amilcingo en resistencia” ha respaldado las acciones de los ejidatarios de Ayala luego del desalojo del plantón que mantenían en San Pedro Apatlaco, que desde hacía cuatro años impedía la conexión del acueducto de la termoeléctrica con la PTAR.