Al encabezar, en Morelos, el foro, con 40 especialistas nacionales e internacionales, las Consultas Temáticas Política de Drogas para la Construcción de la Paz y la Reconciliación Nacional, el siguiente titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Alfonso Durazo Montaño, declaró que el próximo Gobierno federal no impondrá una política contra las drogas, y sin consenso no habrá amnistía, por lo que el proyecto tomará forma en las mesas temáticas que se efectuarán en el país.
Aclaró que las mesas de debate no son para que el nuevo gobierno reciba el aval en su política anti drogas, explicó: "¿cuál debe ser la política de drogas del futuro Gobierno para ayudar al proceso de pacificación y reconciliación nacional? que se decida en la mesa: amnistía o perdón; nosotros sí creemos que el perdón es imprescindible como sociedad para liberarnos de rencores, de odio, resabios, pero es muy difícil pedir esto a las víctimas.
La verdad es que no ha habido proceso de reconciliación y pacificación en ninguna país sin el perdón, porque el perdón alivia como sociedad, ahora este es personal e individual no necesariamente tiene una consecuencia jurídica
Destacó que el foro no se abrió a la sociedad porque no todos pueden abonar en propuestas a la política de drogas y pacificación; por ello, un grupo de 40 expertos expusieron diversas propuestas y un cuerpo de relatores recogieron las propuestas, por lo que aquellas que alcancen mayor consenso en la mesa tendrán mayores posibilidades de convertirse en realidad.
Tras reflexionar sobre la seguridad pública en México, comentó que está destrozada y por ello, debe entenderse cuando el nuevo gobierno habla de perdón no significa sacar de la cárcel a todos los delincuentes.
Respecto al Mando Único, señaló que no será prioridad para el nuevo gobierno, porque invade esferas gubernamentales; "para nosotros el problema de la inseguridad no es un problema de quién manda, es un problema de calidad de las policías; si el mando se unifica, pero no se modifica la capacitación y la preparación, el resultado será la misma inseguridad".
Además aseguró que el problema del país en materia de inseguridad es el "crimen uniformado, y que los policías estén asociados al crimen organizado, pero todo derivado de la corrupción, por eso la prioridad es combatir la corrupción antes que el mando y que cualquier cosa, corrupción; número dos capacitación y profesionalización; tres mejoramiento de las condiciones de las y los policías".
Del mismo modo, expuso que sugerirá al gobernador electo, Cuauhtémoc Blanco, los nombres de cinco personas que se podrían hacer cargo de la Seguridad Pública en Morelos, lo que no debe tomarse como una imposición, pues el listado se ofrecerá a solicitud de Blanco Bravo.
En cuanto a su visión sobre la política de drogas, comentó: "creo como liberal en la libertad, creo que debemos dejar a cada una de las personas la libertad de consumir o no, estoy a favor de una liberalización de las drogas para el consumo lúdico y médico, pero no lo voy a decir en las mesas", acotó entre risas.
Entre los asistentes al debate en las instalaciones del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) estuvieron Hortensia Reyes, Florencio Salazar, Juan Ramón de la Fuente, Adriana Lozano, Nora Frías, Antonino de Leo, Salome Flores, Jorge Ríos (todos de la ONU), Jiussepe Crezzo procurador de Justicia de Florencia Italia, Miguel Álvarez de Serapaz, Hans Matew de la fundación Hebert, y especialistas del instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM.