Ante los señalamientos en su contra cuando fungió en el área de Gobernación municipal, el alcalde electo de Cuernavaca, Antonio Villalobos Adán, destacó que el tema fue aclarado en 2014 cuando dejó el área, pero que fue sancionado sin ser notificado.
Asimismo, expuso que en lugar de perder el tiempo en golpeteos e intereses ajenos al avance del municipio, estará concentrado en buscar gestiones para la capital, pese a que entra en funciones hasta enero.
Recordó en 2014, en el área de Gobernación se le trató de aplicar una sanción por responsabilidad de otros funcionarios, aunque resaltó que incluso ocurrió cuando ya había renunciado.
Además, acusó que no quiso continuar porque le pidieron 250 mil pesos para estar al frente, por lo que prefirió quedar fuera del Ayuntamiento; destacó que en represalia se le trató de juzgar sobre algo que no era su culpa.
Villalobos Adán confió que el gobernador electo ni siquiera está metido en este lío de descalificar a otras autoridades electas, sino más bien su representante José Manuel Sanz está presionando y haciendo todo.
Destacó que la actual administración ha dejado de lado su interés por los programas del año entrante, y de forma “casi” intencional no realiza su labor de gestión. Por ello, aclaró que personalmente acude a las dependencias federales y al Congreso de la Unión, porque en caso contrario, Cuernavaca no aparecerá en el presupuesto del año próximo.