Artesanos invitados a participar en la Semana Estatal de la Cultura Indígena llevada a cabo en el Centro Cultura Jardín Borda, señalan que la falta de difusión para este tipo de proyectos ocasiona que tengan bajas ventas y que incluso, la inversión para trasladar el producto resulte más alta que las ganancias que obtuvieron.
La Semana Estatal fue coordinada por la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso), y como parte de la serie de eventos para tal fin se invitó a al menos 80 artesanos de varios puntos del estado para que ofrecieran sus producto en Jardín Borda, sin embargo, varios de ellos reconocen que hubo poca difusión y en consecuencia pocas ventas.
Uno de ellos Raziel Pacheco, artesano originario de Ayala, comparte que el también fue invitado a participar pero solo alcanzó a vender un 10 por ciento de los productos que trajo de su municipio, cuando la expectativa era de al menos un 50 por ciento.
No han salido muy bien las ventas, no hemos tenido tanto, la expectativa que teníamos era de vender por lo menos el cincuenta por ciento pero si acaso vendimos un diez; pedir a las autoridades que haya más difusión y con algunos días de anticipación para que la gente pueda hacer sus planes y venir a conocer.
Solicitó también se les brinde más apoyo a los talleres familiares con los que se da empleo a más personas en la comunidad.
En mi taller trabajamos un compañero, mis dos hermanos y yo, también nos apoya mi mamá, mi abuelito y mi papá, tenemos 11 años con el taller de cartonería y estamos ubicados en dos puntos, en el Museo de Arte Popular que se ubica en calle Hidalgo y el otro en una tienda del Parque Chapultepec.
A sus 31 años él ya es la segunda generación de cartoneros en su familia, la que comenzó fue su madre.
En Jardín Borda, Raziel ofreció sus productos hechos de cartón o papel reciclado, figuras desde gallinas, aguacates, toritos, chinelos y máscaras.
Tenemos la técnica en cartonería tradicional, ya sea de papel craft, hojas bond o papel periódico que nos donan las instituciones, bancos o conocidos que tiene documentos que ya no utilizan, trabajamos con engrudo para darle al forma, ya que esta seco lo decoramos.
Los precios van desde 20 pesos por una pieza pequeña, hasta los 2 mil dependiendo "del decorado y tamaño".
Las máscaras son elaboradas en 2 días cuenta; Raziel y sus hermanos buscan que esta técnica no se pierda y es por eso que también llevan a cabo talleres y cursos en el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam).