Desde la mañana de martes, en algunas tiendas se percibía una gran cantidad de personas, sobre todo en el centro de Cuernavaca, pensaban que se instalaría el tianguis de Reyes Magos en calle Guerrero.
Pero este año las autoridades del Ayuntamiento de Cuernavaca no permitieron la instalación de dicho tianguis para evitar aglomeraciones e incremente los contagios de Covid-19.
Tiendas como Woolwort presentaron largas filas desde las 8:00 horas.
Tiendas que venden juguetes en el primer cuadro de Cuernavaca se apreciaban con actividad, al igual que los supermercados como Aurrera de la Luna y Chedraui Jacarandas.
Entre los juguetes que más buscaban los Reyes Magos están las muñecas, barbies, princesas, castillos, casas para muñecas, patines, automóviles de control remoto, pistas de carreras, figuras de superhéroes, juegos de mesa, triciclos, consolas y vídeojuegos.
Para niños más grandes y adolescentes los más buscados son celulares, tabletas digitales, audífonos, computadoras y ropa.
Implementan operativo en Cuautla
Por otro lado, los principales supermercados y tiendas de autoservicio de Cuautla abrieron sus puertas para recibir desde muy temprano, este martes, a decenas de ciudadanos que acudieron en busca de juguetes. En medio del escenario que propone la fase roja en el semáforo de contagios de Covid-19, el personal reforzó las medidas preventivas para evitar nuevos contagios del virus entre la población.
Así pudo constatarse en Plaza Los Atrios, de Tetelcingo, uno de los principales centros comerciales de Cuautla, dada la presencia de grandes tiendas como Walmart, Liverpool y Sam’s Club, además de tiendas de ropa y de artículos de tecnología. Tras la clausura de una tienda hace una semana por parte de la Coordinación Estatal de Protección Civil, las empresas intensificaron la vigilancia al interior de los establecimientos, vigilando que sólo ingresara una persona por familia y que los compradores respetaran la sana distancia.
En algunos casos, el personal realizó rondines entre los pasillos. En los accesos se insistía en la misma recomendación, además de aplicarse gel y tomarse la temperatura de quienes ingresaban.
Las tiendas lucieron repletas de ayudantes, que mantienen la tradición pese a la pandemia que también limitó el envío de cartas de los niños
Con información de Emmanuel Ruiz