El robo de vehículo con violencia se incrementó en un 70 por ciento, al igual que el robo de automotores en general, esto sólo en el primer mes de este año, señaló el Gerente en Morelos de la Oficina Coordinadora de Riesgos Asegurados (OCRA), Francisco Rodríguez Longar, pues informó que los 90 vehículos asegurados que fueron robados y de los que sólo se recuperaron cinco, 63 fueron robados por los delincuentes a sus propietarios principalmente a punta de pistola.

Pero por otra parte, Rodríguez Longar puso de manifiesto que se debe de tomar en cuenta que por cada vehículo asegurado que se roban los ladrones, por igual se roban otros tres no asegurados, por lo que la cifra en enero de este año estaría llegando mínimamente a 270 vehículos robados en el estado, situación por demás preocupante porque pone de manifiesto que la delincuencia ha incrementado sus actividades ante la falta de prevención y contundencia de las autoridades.

Por otra parte el representante de la OCRA en Morelos, señaló que de acuerdo con las estadísticas que realiza su oficina sobre el robo de vehículos, de los 90 automotores robados en el estado, el municipio donde más se registraron estos delitos fue Cuernavaca con un 55 por ciento, siguiéndole Jiutepec con un 20 por ciento y Cuautla con otro porcentaje muy similar.

En medio de esta creciente problemática, Rodríguez Longar destacó que el propietario de un vehículo que ha sufrido el robo de su automotor sigue siendo doble y hasta triplemente revictimizado, porque cuando su auto es encontrado por la policía este es remitido a corralones donde en la gran mayoría de los casos le cobran miles de pesos, "por las maniobras y el depósito", para poder recuperarlo; calvario al que se debe sumar el que también padecen con el Ministerio Público que muchas veces les tarda meses para devolverle su coche y en la gran mayoría de los casos desvalijado.

Rodríguez Longar destacó que en el caso de los vehículos asegurados, la OCRA cuenta con corralón para que sean depositados los automotores cuando son recuperados, sin costo para los propietarios, pero los policías que los encuentran los remiten a otros corralones, donde les cobran a los afectados miles y miles de pesos, sin que hasta el momento ninguna autoridad haya intervenido para poner un alto a esta revictimización de quienes sufren el robo de su vehículo.