La consulta ciudadana para decidir el destino de la termoeléctrica de Huexca, en el estado de Morelos, inició en medio de una serie de disturbios en los municipios de Temoac y Jantetelco, donde un grupo de opositores al proyecto quemó el material con el que se llevaría a cabo este ejercicio planteado por el gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador, para resolver el conflicto causado por la central energética de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Los manifestantes partieron desde temprano de la comunidad de Amilcingo, en Temoac, donde hace unos días fuera asesinado el activista y comunicador comunitario Samir Flores Soberanes, uno de los principales opositores al Proyecto Integral Morelos (PIM).
Los pobladores salieron en caravana a la cabecera municipal, donde, en un primer acto de protesta, prendieron fuego al módulo y a las boletas que aguardaban la jornada electoral, impidiendo el desarrollo de la consulta. Posteriormente, la caravana se trasladó a la plaza de la comunidad de Amayuca, en el municipio de Jantetelco, donde, en un acto similar al de Temoac, los opositores frenaron el desarrollo de la consulta.
Una vez que se corrió la noticia de la quema de boletas y material en Temoac y Jantetelco, funcionarios de casilla de otras localidades tomaron la decisión de cancelar las mesas en varios puntos de la región Oriente del estado: en módulos de Zacualpan de Amilpas, Jonacatepec, Hueyapan, Tetela de Volcán, Ocuituico e, incluso, en la comunidad de Huexca, donde la jornada inició sin contratiempos, las mesas fueron retiradas al filo del mediodía, ante el temor de que la caravana de opositores llegara en cualquier momento.