La asociación Re-Activa MX realizó un estudio donde informa que al año la contaminación generada por automóviles es de 88 mil 366 toneladas de CO2, mientras que el costo social de ésta es de más de 35 millones de pesos al año.

Frente al panorama anterior surgió el proyecto Paseo Palmira, en Cuernavaca, que mediante un reordenamiento vial busca generar alternativas de transportes amigables con el medio ambiente.

La idea contempla un ciclocarril con más de 8.7 kilómetros de infraestructura ciclista. De estos al menos 6.6 kilómetros están destinados para el ciclocarril, mientras que los 2.1 restantes serán carriles de prioridad ciclista.

Carlos Hernández Adán, director del Instituto Municipal de Planeación y encargado del proyecto, explicó que apenas están en la fase experimental.

La apuesta, dijo, es el completo funcionamiento del Paseo Palmira al que le han invertido un millón 400 mil pesos, de manera que cuente con cuatro mil 380 metros de infraestructura segura y 18 paradas de transporte ordenadas.

“Una de las metas es que el proyecto de reordenamiento combata la crisis climática por el uso de medios activos de movilidad. (Asimismo) creará condiciones para que convivan de manera segura todas las personas”, consideró.

Diferencias sustanciales

“La ciclovía es cuando confinan el espacio donde se van a trasladar los ciclistas y cualquier medio no motorizado, como patinetas, sillas de ruedas. Está delimitado con señalizaciones en el suelo (topes). El ciclocarril únicamente se visibiliza con balizamiento de las líneas que separan los carriles y con el doble alineado donde se ponen los reflejantes (fantasma); sin embargo, en algunas partes se convierte en carril compartido con vehículos motorizados”, explicó Hernández.

Agregó que el Paseo Palmira contempla lugares donde por sus características no se permite realizar el confinamiento, aunque se debe trabajar en señalizaciones (topes) para evitar situaciones de riesgo con los ciclistas y automovilistas, esto en vueltas de glorietas donde se puede invadir y lastimar a la persona.

La intención es conectar la línea divisional geográfica de Cuernavaca y Temixco con el centro de la capital morelense, es decir, la entrada será la calle Gloria Almada de Bejarano hacia el Instituto de Investigaciones Eléctricas (IIE), hasta subir a la calle Himno Nacional que conecta a Boulevard Benito Juárez con dirección al Centro Histórico.

Cuestiones técnicas

En el ciclocarril en Avenida Palmira hay partes donde los dos carriles cuentan con un ancho mínimo de al menos 2.70 metros; hay otros con 3 metros más 1.76 metros de cada ciclocarril, sin embargo, cuando no hay estas condiciones se tiene que generar un carril compartido.

Asimismo, otra de las problemáticas existentes son las paradas o derroteros de los camiones que ahí transitan, en virtud de que los vecinos se han pronunciado en contra del proyecto debido a que, argumentan, es una avenida principal que no se presta para un ciclocarril.

Al respecto, Hernández Adán explicó que en horas pico (6:00 a 8:00 horas, 13:00 a 15:30 horas y 18:00 horas) el recorrido es de 27 minutos, mas no de una hora como en otras ocasiones se ha señalado, mientras que en horario normal es de tan solo ocho minutos.

Pero los vecinos dijeron que estos estudios se realizaron al finalizar 2021, cuando la afluencia por pandemia era menor, por lo que pidieron unos nuevos.

“Se están analizando etapas dentro de los programas de las 13 vialidades seguras. La más adecuada era Palmira, por lo que el proyecto continuará en su fase experimental”, añadió.

Ya que a estas alturas falta la señalética, líneas verdes, para marcar las paradas, así como reductores de velocidad y delimitar los espacios de movilidad activada.

Opiniones encontradas

Rubí Espinal, vocera del Colectivo Intrépidas, mencionó que se encuentran contentas de que por primera vez en la capital morelense se considere de manera seria y formal otro tipo de movilidades: “Lo que se busca es tener espacios más seguros. Es un comienzo y por lo pronto estamos motivadas para tener mejores vialidades".

A su vez, colonos se han manifestado en contra, pues consideran que Palmira no es una avenida que pueda albergar un espacio confinado a un sólo uso como la bicicleta. Claudia Zamudio, vecina, aseguró que resultan afectados al intentar salir de sus propiedades, por ello buscarán un acuerdo con el Ayuntamiento.

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