Wendy Lizette García Patiño, multimedallista en lucha olímpica y actual entrenadora de esta disciplina, doble ganadora del Premio Estatal del Deporte destaca que desde niña tuvo que aprender a hacer cosas que antes sólo hacían los hombres.
“Aprendí desde niña a cambiar desde un foco hasta un tanque de gas”, dijo, en el marco del Día Internacional de la Mujer de este 8 de marzo. Admite que romper con esos estereotipos le ayudó a formar su carácter desde los primeros años de vida al ser hija de madre soltera y quedar al cuidado de su abuela.
“Dependíamos de un vecino o un familiar para realizar actividades que eran propias de hombres, hasta que un día un tío me enseñó cómo cambiar un tanque de gas, y desde entonces me di cuenta que las mujeres podíamos hacer cosas que hacían los hombres, y no esperar a que nadie nunca más, me ayudara a hacer alguna de esas actividades”.
Durante su exitosa experiencia de vida, la atleta ingresó al mundo de la lucha olímpica a través del grupo del Pentatlón Militarizado hace 18 años, sin imaginar en ese momento las grandes satisfacciones que obtendría con la participación en esta ruda disciplina a nivel local, estatal, nacional e internacional.
Entre lo más destacado se encuentra el ser campeona nacional en las categorías Juvenil y Senior, ganadora del bronce en Campeonatos Panamericanos Junior y Senior, bronce en los Juegos Centroamericanos y del Caribe celebrados en 2010 en Mayagüez, plata Panamericana en 2012, y el séptimo lugar en la Copa del Mundo desarrollada en la ciudad de Vantaa, Finlandia en ese mismo año.
De igual manera como atleta tuvo participación en otro rudo deporte como es el rugby, donde en 2015 asistió con la selección mexicana a los Juegos Panamericanos en Canadá.
Su carácter forjado en las áreas de combate, le abrió muchas puertas, pero también le cerró una cuando fue vetada por la Federación Mexicana de Luchas Asociadas en el mejor momento de su carrera, cuando había ganado un lugar en la selección.
Ha ganado dos veces el Premio Estatal del Deporte, primero como mejor atleta en 2009 y luego en el rubro de fomento deportivo en 2019 por su actividad como entrenadora de lucha olímpica, además de formar parte del programa de seguimiento de atletas hacia el alto rendimiento de la Conade desde 2020.