¿Frío en la mañana, mucho calor a mediodía y, otra vez, frío en la noche? En esta temporada es complicado mantener a los más pequeños saludables, pero no imposible.
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En Morelos, la coordinadora de Prevención de Infecciones Asociadas a la Atención de la Salud del Hospital del Niño Morelense, Lizzeth Guadarrama Rivera, ofreció una serie de recomendaciones útiles que pueden ayudar a los padres de familia.
- Protección del frío matutino: Durante las mañanas, cuando las temperaturas son más bajas, es necesario cubrir la nariz y la boca de los niños, ya sea con cubrebocas o bien una bufanda. Se sugiere utilizar el método de la cebolla, que implica vestir a los niños por capas, y si es posible, con ropa interior térmica.
- Hidratación: Durante las tardes, cuando el clima es más cálido, se debe mantener la hidratación a través del consumo de agua simple y evitar exponerlos a largos periodos bajo el sol directo.
- Lavado de manos: El lavado frecuente de manos es una medida efectiva para prevenir la propagación de enfermedades. Se recomienda enseñar a los niños a lavarse las manos correctamente.
- Vacunación completa: Asegurarse de que los niños tengan su esquema de vacunación completo es esencial para protegerlos contra enfermedades prevenibles.
En un boletín de prensa, Guadarrama Rivera señala que los cambios de temperatura pueden influir en la transmisión de enfermedades respiratorias, especialmente durante las mañanas frías.
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Por lo tanto, es aconsejable abrigar a los niños y no confiarse ante los síntomas de enfermedades como el escurrimiento nasal, irritabilidad, fiebre o hundimiento en el pecho.
En caso de presentar estos síntomas, se recomienda llevar a los niños a una revisión médica.
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¿Qué otras medidas ayudan a prevenir enfermedades?
Además de las mencionadas anteriormente, en esta temporada invernal se pueden implementar otras medidas que ayudan a evitar enfermedades comunes en esta temporada como puede ser influenza y Covid.
- Uso de cubrebocas: Se recomienda el uso de cubrebocas en lugares cerrados y con poca ventilación para reducir el riesgo de contagio.
- Evitar el contacto con personas enfermas: Es esencial no exponer a los niños a la convivencia con personas enfermas, ya que esto aumenta el riesgo de contagio.
- Alimentación saludable: Una dieta equilibrada y saludable contribuye a fortalecer el sistema inmunológico de los niños.
Con información del Hospital del Niño Morelense