El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, visitó este viernes el municipio indígena de Coatetelco en donde refrendó su compromiso con los pueblos indígenas, y su respaldo al gobierno estatal que encabeza Cuauhtémoc Blanco.

Que quede claro, que se oiga lejos, llevamos muy buena relación con el gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, no vayan a pensar que como no estamos visitando Morelos está solo ¡Tiene el apoyo del Gobierno Federal, del Presidente de la República! Lo vamos a apoyar para que haga un buen gobierno en beneficio del pueblo

El Presidente reiteró que se continuará con la reconstrucción de viviendas, templos, y espacios públicos; de hacer llegar los apoyos federales “sin moches”. Garantizó empleo a los campesinos que pongan sus tierras para la siembra de árboles; que habrá respaldo con las “tandas del bienestar”, se mejorarán los servicios de salud.

La visita se dio en el campo deportivo La Rivera, del municipio indígena de Coatetelco, ubicado al surponiente de Morelos y que forma parte del valle sagrado de la zona arqueológica de Xochicalco.

El presidente arribó con una hora de retraso, pero se dio tiempo de pasar en medio de una barra metálica llena de gente que lo abordó para plantearle sus necesidades; otras personas sólo lo abrazaron y saludaron o pidieron tomarse “una selfie”.

Más de media hora le tomó llegar hasta el presídium en donde ya lo esperaba el Gobernador, Cuauhtémoc Blanco Bravo, el Consejo Municipal indígena de Coatetelco, y Adolfo Regino, director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas.

Los habitantes lo ungieron con el humo del copal y mirra. Lo coronaron con collares de la emblemática flor de cempasúchil, y Norberto Zamorano, presidente del Consejo Municipal indígena de Coatetelco, le entregó el bastón de mando. Le colgaban listones multicolores que dan cuenta de los colores de la tierra, y de que un gobernante debe ser justo con su pueblo.

RECHAZO A LA MINERA Y PETICIÓN DE ALCALDES

Antes de su arribo, los asistentes hicieron largas filas para entrar en medio de vallas de seguridad, aun así mucha gente no pudo entrar, entre ellos un contingente que portaba unas lonas y más de una decena de cartulinas en rechazo a la explotación de las minas de tajo abierto, no obstante, en las vallas extendieron sus cartulinas y se manifestaron.

Édgar Jaimes expuso que intentarían entregar documentos con más de 8 mil firmas en rechazo a la empresa minera, ya que pretende explotar 17 mil hectáreas de tierras que están en torno a la zona arqueológica de Xochicalco, afectando a los municipios de la zona sur poniente.

Se trata, agregó, de las tierras que concesionó el gobierno panista de Felipe Calderón, y aunque han detenido los trabajos se sigue manipulando a la gente de Tetlama para continuar con el proyecto.

También se presentaron varios presidentes municipales. El alcalde de Jojutla, Juan Ángel Flores Bustamante, informó que pretendían dialogar con López Obrador y exponerle la difícil situación que enfrentan con las políticas del gobierno federal, así como el avance que han conseguido en la mesa de negociaciones en el Senado de la República.

Laura Gutiérrez Irineo, síndica del concejo municipal de Coatetelco, habló a nombre de todos los pueblos y municipios indígenas de Morelos para exponer las múltiples necesidades y la demanda de una mejor calidad de vida.

Específicamente se solicitó presupuesto para los nuevos municipios indígenas de Morelos, y también el derecho a cancelar la explotación de las minas, ya que no hubo consulta; el respeto y reconocimiento a las formas de seguridad de los pueblos.

Jorge Enrique Pérez Meléndez, del concejo municipal indígena de Hueyapan, le entregó un grueso paquete con las demandas.

En tanto, el director del INPI reconoció la creación de los nuevos municipios indígenas que, dijo, complementan la democracia en México. Como ejemplo citó a los más de 500 municipios indígenas de Oaxaca. Llamó al diálogo, consenso y participación ciudadana.

Al tomar la palabra, el Gobernador Cuauhtémoc Blanco agradeció al Presidente su intervención para el rescate de estos pueblos y municipios indígenas, olvidados y marginados, y se manifestó como un aliado de su plan de gobierno y apoyo en infraestructura social para las comunidades indígenas.

Destacó que Morelos se está recuperando del estancamiento heredado y refrendó su compromiso para que Morelos “recupere el lugar que históricamente le corresponde”.

UNA TRANSFORMACIÓN SIN VIOLENCIA

López Obrador resumió que Morelos ha participado en cada una de las transformaciones que ha vivido México: la Independencia (con Juan Álvarez), la Reforma (Benito Juárez) y la Revolución (Emiliano Zapata), “y a nosotros nos toca la cuarta trasformación”.

Dio un amplio discurso de más de 40 minutos en el cual detalló cada uno de los programas de la llamada cuarta transformación y de los avances conseguidos “de manera pacífica sin violencia”.

“Sin violencia estamos llevando los cambios que necesita el país”, hizo hincapié e insistió hasta que finalmente logró arrancar unos aplausos, sin duda de gente ajena a la zona que no sabe cómo está pegando la delincuencia en esta región del sur poniente de Morelos.

“Se está estableciendo el Banco de Bienestar, que tendrá 13 mil sucursales". Repitió que había la mala costumbre de que se entregaba el dinero a las organizaciones y no llegaba completo, “llegaba con moche y eso se acabó”. Las becas, el apoyo a los campesinos, a los adultos mayores “llegará directo”.

En todos los pueblos se va a tener Internet ya se tiene la empresa para conectar a todo México

Agregó que se va apoyar a Morelos con el programa “Sembrando vidas”, que ya está en el sureste, y aclaró que no es empleo temporal, será empleo permanente: El productor pone su tierra, se le entrega la planta de árbol maderable o frutal, de acuerdo con la región y el jornal se paga en 5 mil pesos para cultivar la parcela y tenga trabajo. “El que quiera emigrar que lo haga por gusto no por necesidad”.

Y así, habló de que ya se establecieron los precios de garantías para cultivos básicos, de los programas de apoyo con el programa “la escuela es nuestra”, recordó que se echó abajo la reforma educativa; del incremento de presupuesto para salud, de las “tandas de bienestar” que son préstamos a la palabra, ya que confía en la honestidad de la gente.

Hizo hincapié en el Instituto para devolver al pueblo lo robado, no sólo de la delincuencia organizada sino de los delincuentes de cuello blanco: “Todo lo que ahorremos será para entregar a la gente”, y como ejemplo citó que el Estado Mayor Presidencial, que estaba compuesto de 8 mil elementos ya despareció, y ahora están en la Guardia Nacional para cuidar al pueblo, ya que al presidente “lo cuida la gente”.

Refrendó su compromiso de no endeudar al país, dijo que no habrá gasolinazos, pero se tendrá presupuesto acabando con la corrupción y siendo humilde. “El poder tiene sentido y se convierte en virtud cuando se poner al servicio de los demás”, insistió.

"Nos llevó muchos años la lucha y no podemos fallarle al pueblo", “Antes muerto que traicionarlos”, concluyó.