La directora del plantel del Centro de Atención Múltiple número 3, ubicado en el municipio de Tlaquiltenango, denunció que enfrentan problemas de vandalismo; además resaltó el rezago en las obras de reconstrucción, aún trabajan en carpas de lonas y aulas móviles ya utilizadas a las que se les filtra el agua.
El DIF de Tlaquiltenango alberga dos escuelas: el Jardín de Niños Luz María Serradel, y el Centro de Atención Múltiple número 3 quienes trabajan en aulas móviles, pero reconocen que no son las condiciones más adecuadas; el rezago en las obras de construcción es evidente, pues hubo un largo periodo en que las obras estuvieron paradas por falta de presupuesto y pago a la constructora.
Dadas las condiciones que enfrentan a más de un año del 19S, la matrícula escolar de 130 alumnos del jardin de niños Luz María Serradel cayó a 90 alumnos, puesto que los padres de familia por seguridad prefirieron cambiar a sus hijos de escuela, especialmente después del rezago que hay en la entrega del nuevo inmueble.
En el CAM número 3, los alumnos aún trabajan en condiciones nada favorables, sin el material y equipo, dadas las precarias condiciones de espacios, confirmó la directora Silvia Marchan Delgado.
En las aulas móviles que les facilitaron hasta agosto de este año, se filtra el agua por todos lados, por lo que las han tenido que parchar con chapopote y con lonas de plástico.
Otros grupos trabajan en carpas y en algunos espacios que han logrado les faciliten en el DIF; Marchan lamentó que la construcción de las nuevas instalaciones sean lentas y que incluso sufran problemas de robo y vandalismo del equipo y material que tienen guardado y almacenado en las afectadas instalaciones.
Indicó que no han demolido los inmuebles afectados, como los baños y otros espacios que sirven de bodega en forma provisional; sin embargo expuso que “no podemos cargar con el material y equipo porque donde estamos no son instalaciones apropiadas.
Mostró los refrigeradores, hornos, las parrillas, el equipo y herramientas de los talleres para el desarrollo de habilidades para el trabajo, el material didáctico y mobiliario para las terapias que son propias de la educación para niños especiales, el cual no puede ser almacenado de esa manera.
Los daños que sufrió el CAM con el sismo los ha obligado a trabajar en condiciones nada apropiadas y a resolver con el apoyo de los padres de familia las prioridades; reconoció que los 95 alumnos del CAM preescolar al CAM Laboral padecen el calor intenso, la lluvia y el frío y dan atención a la población de niños especiales de los municipios de la zona Sur del estado.