“Ojalá fuera el diputado 21, me encantaría porque imagínate me iría muy bien”, bromea Cipriano Sotelo Salgado, asesor jurídico del gobernador, Cuauhtémoc Blanco Bravo, al advertir que el Gobierno estatal podría retirar de la propuesta de reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública, las atribuciones que le conferían a la Oficina de la Gubernatura, si eso es lo que detiene la actividad legislativa en Morelos.
En entrevista posterior a la toma de protesta del gobernador, Cipriano Sotelo, que ha participado en el cabildeo de las reformas legales para la Fiscalía, la ley del notariado, la revocación de comisionados del Instituto Morelense de Información Pública y Estadística (IMIPE), expuso que se reunió con todos los diputados “se las expliqué, son temas que a todos les convienen, no es un tema de grupo, trabajé con los asesores de ellos, y se trabajaron esas cinco reformas sin mayor problema. Cuando viene la de la Administración Pública que yo no la trabajé, yo no la concienticé, los señores legisladores no la conocieron con tiempo, pues le ponen un standby, y se detienen las otras cinco”.
Explicó que el nuevo Gobierno puede trabajar aún sin la reforma “no pasa nada si no hay ley orgánica, tristemente se ha politizado mucho, lo que brinca es una figura muy importante que es darle más atribuciones a la Oficina de la Gubernatura, el resto de los puntos no está en pugna”. Y condicionó, “si lo que está en pugna es que el jefe de la Gubernatura no tenga tantas atribuciones, a mí se me antoja que es una postura netamente política y no jurídica, es muy sencillo, saquémoslo de esta propuesta”.
Y abundó: “Todo gobernador en el país tiene facultades ejecutivas y puede hacer un acuerdo en que se den facultades a la jefatura de la Gubernatura, si así es su deseo. No pasa absolutamente nada, se hace de manera práctica, de manera constante, la ley lo permite. Aquí lo que despertó mucha grilla es que se haya propuesto como reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública, pero se saca de ahí y no pasa nada”.