A pasado un año desde que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador dio “carpetazo” a lo que se conoció como “el caso Primavera” en el que el jefe de la Oficina de la Gubernatura, José Manuel Sanz había estado siendo investigado por la Unidad de Investigación Financiera (UIF) a partir de una serie de “dudosas” operaciones financieras.
La “estrepitosa” información que tomó por sorpresa al gobierno de Cuauhtémoc Blanco ocurrió a principios del mes de marzo del año pasado, cuando “en una mañanera” el titular de la UIF, Santiago Nieto, dio a conocer el llamado “caso Primavera”, en el que un jefe de oficina de gobierno local desviaba dinero a Suiza; incluso, detalló que dichas operaciones financieras habían sido por 741 millones de pesos.
En ese momento, dijo que se trataba de “un tercer caso vinculado con un jefe de oficina de un gobierno local”.
“… esta persona recibe transferencias internacionales, regresa una serie de inversiones de una cuenta personal que tiene en Suiza y reportan seis movimientos inusuales por 741 millones de pesos y retiros en efectivo por 122 millones de pesos”, narró.
Apenas días después de esas declaraciones, el 19 de marzo para ser precisos, y después de que diversos analistas y líderes de opinión ya habían llegado “a la conclusión” de que ese funcionario era José Manuel Sanz, jefe de la oficina de la Gubernatura, Nieto visitó “la Ciudad de la Eterna Primavera” para la firma del Convenio de Colaboración entre el gobernador, Cuauhtémoc Blanco Bravo con la Unidad de Inteligencia Financiera.
En Palacio de Gobierno, confirmaría que Sanz Rivera formaba parte de la investigación en el “caso Primavera”.
“Sí, está en proceso de investigación el jefe de la oficina del gobierno del estado, no puedo dar datos por el nivel del sigilo de la investigación porque existe en este momento una disputa jurídica respecto a los límites de la libertad de expresión y derecho al acceso a la información pública cuando estamos en presencia de un principio de presunción de inocencia”, respondió a la pregunta que le realizó una reportera.
Sin embargo, el “caso Primavera” se “marchitaría” apenas tres meses después; el 19 de junio del año pasado, durante una visita a Morelos el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador otorgó una exoneración pública al hombre de confianza de Blanco.
“En el caso de Morelos han habido acusaciones, pero no se ha encontrado ningún delito o presunto delito", fueron las palabras del Jefe del Ejecutivo Federal.
Incluso, y para evitar más cuestionamientos, precisó que “la información” le había sido confirmada por el propio titular de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto.
En entrevista con El Sol de Cuernavaca, el consejero jurídico en el gobierno de Cuauhtémoc Blanco, Samuel Sotelo Salgado, acepta hablar del “caso Primavera” y lo primero que nos dice es que desde su encargo no tuvo conocimiento de que se requiriera información de tipo financiero sobre algún funcionario de la administración estatal, ni antes ni después de la declaración realizada por el Presidente de México.
“En mi carácter de representante del Poder Ejecutivo no he sido requerido para información de esa naturaleza, al menos no desde la Consejería Jurídica”, precisó.
Sotelo Salgado detalló que nunca hubo un documento oficial en el que se requiriera información sobre ese asunto al gobierno de Morelos.
Para el consejero jurídico, “el caso Primavera” nunca tuvo en realidad un sustento si se consideran las declaraciones que los propios funcionarios federales realizaron sobre ello, incluido el presidente de la República. Esto le permite además llegar a la conclusión de que más bien, estuvimos frente a un asunto meramente mediático.
Hasta ahora, el jefe de la oficina de la Gubernatura, José Manuel Sanz Rivera se mantiene en su cargo pese a los pronósticos surgidos desde la opinión pública que auguraban “su caída” tras la mediatización del “caso Primavera”.