En 1879, el pueblo de Anenecuilco vio nacer a un niño que llegaría a ser acreedor a varios calificativos en todo el país: héroe, mártir, bandido. Después de su muerte, a los 39 años de edad, Emiliano Zapata Salazar dejó atrás un legado que pasaría a la historia, y una casa que todavía puede visitarse hoy en día.
El hogar de aquel niño
A menos de un kilómetro del zócalo de la comunidad, cualquier persona puede contemplar los restos de la vivienda en la que nació: los restos de unos muros de adobe y un chinamitl (seto o cerca de cañas) montado sobre éstos conservan las dos viejas estancias en las que Emiliano Zapata vivió sus primeros años.
Se trata de una estructura conservada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y que, desde 1991, es el corazón del Museo Casa de Zapata, abierto de martes a domingo y dirigido desde hace varios años por Enrique Anzúres Carrillo.
El valor histórico de este lugar es invaluable, pues en esta casa vivió don Gabriel Zapata y doña Cleofas Salazar, padres de Emiliano; aquí nació el más importante personaje de la Revolución Mexicana, el más importante de México ante el mundo
Enrique Anzúres Carrillo, director del museo
La antigua casa conserva materiales de su construcción original, a base de adobe y con un techo de zacate de cerro. Hacia dentro es posible apreciar el antiguo espacio en el que se encontraba la cocina, el tlecuil y la mesa donde se preparan los alimentos.
Seguramente había un trastero y una olla con agua
Actualmente, este inmueble histórico se encuentra en proceso de restauración por parte del INAH, en vistas de la conmemoración oficial del centenario luctuoso del héroe, el próximo 10 de abril. En el lugar trabajan especialistas en la restauración de los distintos materiales de los que están hechos los objetos que alberga la casa.
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Un museo abierto al público
Además de los restos de la antigua casa de El Caudillo del Sur, el museo, por el que no hay que pagar para acceder a él, alberga el emblemático mural del pintor Roberto Rodríguez Navarro, que retrata la vida y la lucha del líder agrario a principios del siglo XX, en el Sur del país. Antes del sismo del 19S, el museo contaba con una exposición permanente dentro de sus salas. Sin embargo, desde el 19 de septiembre de 2017 las salas permanecen cerradas en espera de su restauración.