Entre transformaciones y retos celebra el magisterio

Su mayor interés, legitimar el derecho de la niñez y juventud de ingresar, permanecer y concluir sus estudios

Edgar Rosales

  · miércoles 15 de mayo de 2019

Los docentes en Morelos son ejemplo de dignidad y compromiso/ Karen Sánchez

Al menos dos mil 529 millones de pesos destinados a la educación presentan irregularidades año con año en México. Esta suma, equivalente a dos veces lo invertido para capacitar a los docentes en México, se desvía en gran proporción por el uso irregular que se ha hecho de uno de los fondos públicos más importantes en educación: el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo (Fone). En términos generales, con este fondo se financian los salarios de siete de cada 10 trabajadores de educación básica y normal en el país. Esto incluye a docentes, personal administrativo y personal operativo.

Para la operación de la nómina centralizada, el Gobierno Federal aceptó incorporar en el nuevo fondo las prestaciones diferenciadas derivadas de la doble negociación salarial entre el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y las autoridades educativas federal y de los estados, que prevaleció desde la descentralización de la educación básica y normal en 1992.

• El Gobierno Federal incorporó las plazas de docentes estatales en la nómina federal. Estas posiciones se ocuparon utilizando perfiles educativos para realizar funciones administrativas locales, es decir, el crecimiento de la nómina estatal para administración de los sistemas locales se realiza con cargo al presupuesto federal.

• El pago indebido de salarios y prestaciones a comisionados sindicales y trabajadores irregulares.

• Entre enero de 2015 y diciembre de 2018 se destinaron más de mil 66 millones de pesos para el pago de 9 mil comisionados sindicales. Este monto podría haberse usado, por ejemplo, para disminuir las desigualdades del 25% de los estudiantes que asisten a escuelas ubicadas en localidades de alta marginación en educación básica.

Pese a los pagos irregulares detectados, es necesario reconocer que la centralización de la nómina ha permitido mayor orden y transparencia en la administración de los recursos de la nómina educativa. Las irregularidades que se registraban con el FAEB disminuyeron en 84% en el primer año de operación del Fone y en 95% al tercer año.

El 15 de mayo es la fecha fundida en la memoria colectiva de los mexicanos, no sólo para recordarnos el insustituible valor del maestro, sino para reconocer a la educación como sustento de la dignidad individual y de la equidad social.

En todos ellos, el quehacer del maestro se magnifica y se convierte en una tarea llena de nobleza.

Al resaltar la importancia que ha tenido la educación a través del tiempo, podemos afirmar, que en los momentos de las grandes transformaciones sociales, políticas y culturales de la nación, el magisterio ha sido actor fundamental.

Las maestras y los maestros de México tienen la misión histórica de poner la educación al servicio del pueblo; Su mayor interés es legitimar el derecho de la niñez y la juventud de ingresar, permanecer y terminar sus estudios.

Destacando que ser maestro y maestra es un orgullo una profesión de esperanza y transformación. "Las maestras y maestros, han sido siempre ejemplos de dignidad y compromiso. El magisterio es una muestra de lo que es servir al país con entrega total a la educación de la niñez y juventud. Ese es el reto y la tarea: Educar para transformar".

Por otro lado está la cuestión económica, que en estos momentos de grandes dificultades en los distintos espacios del quehacer nacional, no podemos dejar de mencionar, y en Morelos el promedio del gasto en educación anual es de $8,233 millones de pesos lo que equivale al 4% del PIB del estado. El 88% del gasto que es de $ 6,454 millones de pesos es aportación federal, por lo que solo el 12 % de aportación total es del estado.

Recordemos que en el 2015 la federación centralizo el pago de la nomina educativa para corregir irregularidades cometidas en manejo del fondo, haciendo el pago directamente a los trabajadores educativos sin que pasara por el Gobierno estatal como se hacía anteriormente.

Con estos cambios y modificaciones el magisterio espera un pago decoroso y poder acudir a las aulas preocupados y ocupados por enseñar y no por subsistir.

Hoy en día al maestro, si bien lo mueve la fuerza de su vocación y espíritu de servicio, cierto es que entre angustias y zozobras observa como lentamente se deteriora su salud. Sus anhelos de una mejor vida, de mayor tranquilidad para su familia, son cada vez más inalcanzables... pero, sigue ahí, firme y apasionado en su actitud, porque ni el pensamiento se doblega ni la virtud se rinde, y una vez que se es maestro,

¡Se es maestro por siempre!

¡Felicidades!