Al menos el 60 por ciento de las casas de Hueyapan quedaron colapsadas como consecuencia del sismo y a dos años aún hay casas, escuelas, e incluso la ayudantía, sin reconstruir.
Sin embargo, los pobladores dicen que están de pie, y no porque todas las casas ya estén levantadas, sino porque su gente está saliendo adelante, está regresando a la normalidad.
PNR
A través del Programa Nacional de Reconstrucción se está apoyando a las familias de Hueyapan a reconstruir su casa, como es el caso de Jacqueline Pérez, quien está a días de dar a luz a un hermoso bebé; ella junto con su esposo y sus dos hijas ven a este nuevo integrante de la familia como la luz que vino a iluminar su vida después de la tempestad.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Vivienda, (Conavi) en Tetela del Volcán, a donde todavía pertenece el poblado indígena de Hueyapan, se reportaron, de acuerdo al padrón de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y el Fondo de Desastres Naturales (Fonden), mil 446 viviendas con daños parciales y totales.
De esa cifra, en este año, por parte del actual gobierno federal, se ha recorrido a fin de corroborar su situación, mil 448 viviendas, de ellas ya se autorizaron 898 para su reconstrucción con una inversión de 156 millones 840 mil pesos.
Nuestra meta a concluir este años es de 949 casos, con una inversión de 164 millones 087 mil pesos, por lo que nos faltan aprobar 51 casos, informó Ezequiel Sánchez, coordinador de Conavi.
20 de Noviembre
Hace poco más de 80 años fue construida la escuela primaria “20 de Noviembre” en la comunidad indígena de Hueyapan, sin embargo, hace dos años, el 19 de Septiembre, su historia cambio.
El sismo ocasionó que gran parte de sus salones de clases resultaran afectados, al punto de tener de demolerlos por seguridad de los alumnos.
Sin embargo, su demolición empezó apenas en julio de este año, 21 meses después del terremoto.
Samuel Barranco Cerezo, director del plantel desde hace 22 años, dijo que el 19 de septiembre les cambio la vida a todos, “los salones quedaron muy dañados y por esto se tuvieron que impartir las clases en carpas, sin embargo, debido a la actividad del volcán Popocatépetl, sus estructuras se fueron abriendo más por eso se decidió demolerlos”.