Estos días recordamos a quienes se nos adelantaron, a quienes, de acuerdo con la tradición mexicana, bajan al plano terrenal para convivir con los vivos. En lo que va del año han sido muchos morelenses que han perdido la vida, ya sea de manera trágica o por cuestiones naturales. De ellas, algunas han logrado contribuir a la sociedad y al arte. Pero también existen personalidades que no precisamente nacieron en el estado pero que aquí dieron su último aliento.
El año comenzó y la tristeza invadió al gremio artístico y cultural del estado, pues la mañana del 27 de enero se dio la noticia del deceso del cineasta Julio César García. El también promotor cultural nació en Cuernavaca, Morelos, pero su infancia la vivió en el municipio de Temixco y creció en el mercado Adolfo López Mateos, pues sus padres y abuela son reconocidos comerciantes.
Su último trabajo fue el documental “Bendito Mercado”, que retrata al mercado Adolfo López Mateos como un ser vivo que mantiene vivos a muchos otros seres y aborda exactamente cómo es la vida dentro de este gran mercado a través de sus protagonistas, los comerciantes.
El segundo mes del año se dio a conocer la noticia del asesinato del activista y líder social Samir Flores, quien falleció a los 32 años. Originario de Amilcingo, fue fundador de la radio comunitaria de la comunidad y uno de los principales opositores al Proyecto Integral Morelos. Hasta el momento no se ha dado con los responsables de su homicidio.
El deceso del historiador morelense Carlos Barreto Mark también sacudió a la sociedad estatal, pues, con más de 45 años de trayectoria, es considerado uno de los precursores de la investigación histórica en la entidad.
Barreto Mark nació el 14 de agosto de 1937 y murió a los 82 años a causa de algunos problemas de salud.
Durante los últimos años de vida dirigió el Museo Histórico del Oriente de Morelos "Casa de Morelos"; durante su dirección, el lugar en el que hace años viviera José María Morelos destacó por la gran cantidad de eventos culturales que ahí se realizaron; además, Barreto Mark tiene varias publicaciones entre las que destacan Los corridos de Marciano Silva, Apuntes para la Historia: El Sitio de Cuautla de 1812, de Felipe Montero, "El Có-dice Coatlán del Río".
Hace unas semanas también se informó del fallecimiento de quien fuera considerado uno férreo defensor ambiental, Paul Humberto Vizcarra Ruiz. El cuerpo del activista fue localizado en la alcaldía de Tlalpan, en la Ciudad de México, tras algunos días de ser reportado como desaparecido.
Su último suspiro, en Morelos
De muerte natural o violenta, Morelos ha sido el lugar en el que varios personajes históricos y famosos, ya sea por un motivo u otro, han dado su último aliento. Hay casos en que sus restos fueron llevados a otro sitio o, incluso, esparcidos en el mar, pero también hubo quien fue sepultado en un pequeño espacio del terreno que adoptó como su casa, a pesar de no ser originario de este país.
Si nos remontamos unos años atrás, el 10 de abril de 1919, al entrar en la exhacienda de Chinameca, engañado por el general Jesús Guajardo, quien le había prometido armamento para volver a encender el movimiento revolucionario que el Caudillo del Sur inició en el sur del país, en su natal Ayala. Aunque inicialmente su cuerpo fue sepultado en el panteón municipal de Cuautla, en la actualidad sus restos se encuentran en un mausoleo ubicado en la Plaza de la Revolución del Sur, en el municipio de Cuautla, un espacio público que se ha convertido en uno de los principales sitios de interés de esta ciudad.
Nacido en Chihuahua, el militar y pintor David Alfaro Siqueiros vivió en varias partes de México y del mundo (como Chile y Cuba), pero decidió pasar sus últimos años en Cuernavaca. Siqueiros pasó los últimos nueve años de su vida en el estudio que él mismo diseñó en la capital del estado, un espacio que hoy es conocido como "La Tallera", un importante centro cultural. Si bien Siqueiros murió en Morelos, sus restos reposan en la Rotonda de las Personas Ilustres, en la Ciudad de México.
Robert Brady fue un viajero, un bohemio y un amante de las artes plásticas y un asiduo coleccionista. Actualmente, la casa en la que Brady vivió, en la ciudad de Cuernavaca, es un museo abierto al público en el que los visitantes pueden admirar todas las obras que coleccionó durante su vida, algo que fue posible porque él mismo así lo quiso. Contrario a otros personajes que murieron en Morelos pero cuyos restos fueron sepultados en otro sitio, los restos de Robert Brady reposan en el jardín de su antigua casa, junto a los de sus dos perros.
Proveniente de Costa Rica, María Isabel Anita Carmen de Jesús Vargas Lizano murió el 5 de agosto de 2012 en Cuernavaca a causa de problemas crónicos en el corazón, los pulmones y los riñones. Considerada como una de las figuras más importantes de la música ranchera en México, en 2007 recibió el Premio Grammy a la Excelencia Musical de la Academia de las Ciencias y Artes de la Grabación. Después de haber vivido gran parte de su vida en su querido Tepoztlán, parte de sus restos fueron lanzados al mar de Veracruz, de acuerdo con uno de sus deseos.
Con información de Rosaura Hernández, Maritza Cuevas y Emmanuel Ruiz
