La hipertensión arterial causa la muerte de nueve millones de personas al año en el mundo, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo que la hace una de las principales causas de mortalidad en México y el mundo debido a su falta de sintomatología.
La OMS define a la hipertensión arterial como un trastorno en el que los vasos sanguíneos tienen una tensión persistentemente alta, lo que puede dañarlos.
La tensión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de los vasos (arterias) al ser bombeada por el corazón. Cuanto más alta es la tensión, más esfuerzo tiene que realizar el corazón para bombear.
El tener hipertensión arterial alta es peligroso porque entre más alta, mayor es el riesgo de daño al corazón y a los vasos sanguíneos de órganos principales como el cerebro y los riñones.
Según los resultados de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, se estima que en México hay 22.4 millones de adultos de 20 años o más que la padecen, de los cuales 11.2 millones tienen diagnóstico médico. De los mexicanos con tratamiento, 5.7 millones mantienen el padecimiento controlado.
El sobrepeso y la obesidad pueden aumentar la presión arterial, así como la falta de actividad física, consumo excesivo de sal y alcohol, la ingesta insuficiente de potasio, el tabaquismo, estrés, antecedentes familiares de hipertensión y tener más de 60 años de edad.
Hay quien puede presentar síntomas como dolor de cabeza intenso, mareo, zumbido de oídos, sensación de ver lucecitas, visión borrosa, dolor en el pecho y/o lumbar y tobillos hinchados.
Para prevenir, deben de medirse su tensión arterial periódicamente, no fumar, adoptar una dieta saludable, hacer ejercicio y evitar el uso nocivo del alcohol y reducir la ingesta de sal. De ser insuficientes, se debe de tomar medicamentos con prescripción médica.
Hipertensión y Covid-19
Autoridades de Salud del IMSS señalan que durante la emergencia sanitaria por Covid-19, es fundamental que un paciente hipertenso tome sus medicamentos y mantenga sus niveles de presión arterial menores a 130/80mmHg y mayores de 110/70mmHg.
Mencionan que el hecho de tener hipertensión arterial controlada y Covid-19 no agrava el padecimiento, pero si se agregan otros factores como la edad avanzada, diabetes, enfermedades cardíacas previas, tabaquismo y esto les ha generado un daño a nivel pulmonar, sí representa un riesgo mayor.