La mujer se utiliza más en la publicidad porque es más fácil de consumir, más fácil de vender y más fácil de comprar, se utiliza una imagen sexista que la convierte en objeto de consumismo, pero más en un objeto del deseo sexual.
En pleno Siglo XXI, los medios publicitarios y de comunicación siguen viendo en la mujer la forma más fácil de vender; utilizan una imagen sexista aun cuando hay una mayor conciencia sobre los derechos de las mujeres.
De acuerdo con un estudio del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), persiste esta imagen, en donde se muestra a la mujer como objeto de deseo, por encima de su persona y su dignidad, colocándola dependiente del hombre o inferior a él, y relacionándola con el cuidado de la familia y las labores domésticas.
Sexismo en la publicidad
Jocksan Terrones Menchaca, especialista en Marketing Digital, informó que existe una serie de elementos para identificar el sexismo en la publicidad. Un anuncio es sexista cuando promueve modelos que consolidan pautas tradicionalmente fijadas para cada uno de los géneros.
Asimismo, precisó que fija unos estándares de belleza femenina considerados como sinónimo de éxito; ejerce presión sobre el cuerpo femenino a través de determinados tipos de productos; presenta el cuerpo de las mujeres como un espacio de imperfecciones que hay que corregir y sitúa a los personajes femeninos en una posición de inferioridad y dependencia.
Básicamente la mujer es considerada dentro del marketing como una 'Barbie'. Debe ser perfecta, obediente, sumisa y fácil de consumir, y cuando se intenta cambiar esta imagen, simplemente no se vende. Quieren que veamos a una mujer perfecta cuando la realidad es que no las hay
La Cosificación de la mujer
Marisol Martínez Bautista, activista y defensora de los derechos humanos de las mujeres, a través del Colectivo Girasol recordó que históricamente las mujeres fueron consideradas como un eslabón de la sexualidad, convirtiéndose posteriormente en un objeto.
Esta forma de ver a la mujer se hace notar en los diferentes medios de comunicación, así como en los medios publicitarios. Tan sólo basta recordar los anuncios que eran exhibidos e los años 50 y 60, en donde se denigraba a la mujer y que, incluso, fomentaban la violencia de género.
Sin embargo, en la actualidad, a pesar de que existe mayor conciencia acerca de sus derechos, la mayoría de los estereotipos sigue latente, variando sólo en su forma, adaptándose a la realidad de su tiempo.
"Basta ver como en un video de reggaetón aparece un hombre que es exhibido como un macho, vigorizante, superdotado, y a su alrededor muchas mujeres semidesnudas, acosándolo, siguiéndolo, deseándolo; esto es una forma de cosificar a la mujer", detalló.
Sexismo influencer
Jocksan Terrones reconoce que el internet está cambiado la forma de hacer publicidad, muestra de ello son los llamados "Influencer", quienes cada vez adquieren más presencia y protagonismo en el uso y diversidad de las redes sociales.
Y la mujer aquí es un punto clave para vender, "la mujer está considerada dentro de una cultura de influencer, ya que puede influir en otra mujer, así como en el hombre. Esto hace que cada día veamos cómo las mujeres son utilizadas para promocionar marcas a través de sus redes sociales".
Mujer vs Hombre
El que una mujer aparezca como un objeto en un medio afecta la forma en que es tratada por un hombre.
Tan fácil como poner como ejemplo nuevamente de los videos de reggaetón, "los hombres observan estas conductas como naturales, en donde las mujeres se dejan ver como un objeto; después vemos cómo las niñas empiezan a bailar de una manera sexual siendo observadas por hombres más grandes, haciéndose a la idea de que todas somos 'putas', palabra que tiene una connotación fuerte en la vida de las mujeres", dijo Marisol Martínez.
Por ello, los medios de comunicación y publicitarios tienen un papel importantísimo por hacer como institución constructora de valores y preceptos que socializan al individuo hacia una identidad y personalidad en donde realmente se construyan formas de actuar y pensar lejos de ver a una mujer como un objeto sexual.
Sin embargo, para el especialista en Marketing Digital será difícil que publicistas quieran cambiar sus estrategias "toda vez que la mujer es más fácil de vender y porque estamos luchando con una cultura machista. Complicado, pero no imposible lograr la igualdad en los medios de publicidad".
Esto es debido a que entre 60 y 80 por ciento de las compras que se hacen en el mundo son realizadas por mujeres; ellas son el verdadero motor del consumo, aunque sus ingresos generalmente todavía sean menores que los de los hombres.
"Por ello, no sorprende que gran parte de la publicidad sea dirigida específicamente a las mujeres, pero, imponiéndoles roles muy alejados de la realidad de gran parte de la población femenina actual y de sus aspiraciones", señaló.
Trabajo por hacer
Marisol Martínez reconoció que aún hay mucho trabajo por hacer, y qué mejor que empezar que cuestionar sobre qué se está haciendo mal para creer que una mujer es un objeto, una cosa, "se deben trabajar las garantías individuales de las mujeres para darnos cuenta que no somos objetos sexuales".
En tanto, para Jocksan Terrones, deben ser las autoridades a nivel nacional y estatal quienes generen las condiciones para lograr la igualdad en la publicidad y medios de comunicación, "quitar el sexismo dentro de la publicidad, de la promoción, de los medios de comunicación puede que sea tardado y complicado, pero no imposible".
De acuerdo con el Conapred, si se quiere ser un consumidor inteligente, se deben evitar comprar aquellos productos cuyos anuncios publicitarios ofendan, y si se quiere lograr un cambio, lo mejor es denunciar.
EDECANES
Todos negocio que será inaugurado, apenas inicia, o que busca incrementar sus ventas busca en la mejor publicidad: a través de la presencia de mujeres.Se dividen en tres categorías:
Promo edecán: se ubican principalmente en centro comerciales, pueden no ser tan guapas y de estatura baja, su sueldo de 200 pesos por ocho horas aproximádamente.
AA: Llegan a medir hasta el 1.69 metros, por lo regular participan en inauguraciones de eventos. Ganan hasta 100 pesos por hora.
AAA: miden más de 1.70 metros. Ganan hasta 400 pesos la hora y por lo regular trabajan únicamente cuatro horas.
