No se puede hablar de Morelos sin mencionar su gran variedad de atractivos turísticos, y parte de ellos son los balnearios, algunos construidos provisionalmente, otros en donde su infraestructura es su principal referencia, pero todos ellos ofrecen mucha diversión al contar con albercas, chapoteaderos, ríos, y muchos más atractivos.
Sin embargo, el Covid-19 vino a cambiar la vida de todos, sobre todo detuvo la actividad comercial y turística, incluyendo los centros acuáticos.
Desde hace cuatro meses, los balnearios cerraron sus puertas como una medida para mitigar los contagios de Coronavirus, y pese a que hasta el momento todos se han mantenido de pie, el que aún no haya fecha para su reapertura podría ocasionar su cierre definitivo.
Morelos y sus balnearios
De acuerdo con la Secretaría de Turismo y Cultura, en Morelos hay 49 balnearios y parques acuáticos, siendo Jojutla y Yautepec los que concentran el mayor número con 11 y 10 respectivamente, de ahí le sigue Cuautla con 4; con 2 o 3 centros acuáticos están: Amacuzac, Axochiapan, Ayala, Cuernavaca, Jiutepec, Jonacatepec, Mazatepec, Puente de Ixtla, Temixco, Tepalcingo, Tetecala, Tetela del Volcán, Tlatizapán, Tlalquitenango, Tlayacapan, Totolapan, Xochitepec y Zacatepec.
Sin embargo, los más nombrados son Agua Hedionda, Los Limones, El Elmeal, El Rollo, CentroVacacional Oaxtepec, Los Manantiales, Las Estacas, Six Flags Hurricane Harbor, Issstehuixtla y Las Huertas.
Sin fecha para el regreso
El presidente de la Asociación de Parques Acuáticos y Balnearios de Morelos (Apabam), Mario García Ordoñez informó que hasta el momento no se tiene una fecha precisa para poder reabrir los centros de diversión acuática, sin embargo, desde el mes de junio se han preparado para poder implementar los protocolos necesarios para brindar la mayor seguridad a los visitantes.
De acuerdo con el gobierno federal, todas las empresas dedicadas al turismo, como los centros acuáticos, deberán de apegarse a las disposiciones establecidas por esta autoridad, y deberán facilitar los medios para que las personas trabajadoras puedan realizar los protocolos necesarios.
Las disipaciones generales del Lineamiento Nacional para la Reapertura del Sector Turístico, manifiestan que toda empresa deberá adquirir y poner a disposición los insumos para la sanitización de espacios, para la protección personal, para la colocación de barreras físicas si fuera el caso y para mantener la higiene (equipos, recursos y materiales necesarios) en el establecimiento, a fin de garantizar el retorno seguro de los trabajadores, clientes y proveedores a las actividades esenciales del centro laboral.
Además se deberá establecer el protocolo para la realización de filtros sanitarios y detección de signos de enfermedades respiratorias (fiebre, tos, flujo nasal, dificultad para respirar), con el fin de remitir a su domicilio en aislamiento voluntario a quien los presente y disminuir el riesgo de contagio para el resto de las personas (lineamiento general para la mitigación y prevención de Covid-19 en espacios públicos cerrados).
En sus marcas, listos...
El presidente de Apabam informó que se ha capacitado a todo el personal para implementar dichos protocolos y poder recibir a los visitantes con distanciamiento social y manteniendo las medidas de higiene.
Esta será la nueva normalidad y nos debemos acostumbrar a ella, lo buenos de nosotros, es que estos espacios son abiertos, tenemos jardín y con el acceso de sólo el 30 por ciento de la capacidad total en un inicio, vamos a cumplir con las normas sanitarias.
Como parte de esta nueva normalidad, los trabajadores deberán disponer de todas las herramientas y equipo de trabajo, tanto en las áreas de albercas, como en las zonas de alimentos y restaurantes.
¿Con agua clorada no pasa el virus?
De acuerdos con el Subsecretario de Salud del gobierno federal, Hugo López-Gattel "no se considera, dado el mecanismo de transmisión, que la alberca por sí misma pueda ser una vía de transmisión".
Lo anterior, al señalar que las albercas están cloradas y la concentración de cloro es suficiente para eliminar a un virus como el Sars-Cov 2.
La concentración que se requeriría de virus, aún si no estuviera clorada el agua, para que pudiera dar un contagio efectivo tendría que ser extremadamente alta, es decir, se disuelve las partículas de virus que definitivamente sí pueden estar en la saliva de una persona enferma o en las secreciones respiratorias y al llegar a la alberca se disuelven en un gran volumen de agua, señalaba durante la rueda de prensa nacional del 1 de julio.
No obstante, señaló que lo que sí podría contribuir a los contagios, igual que ocurre en ambientes secos, es la proximidad de las personas.
Opiniones encontradas
Para Francisco Alburua, propietario del balneario Los Limones, señaló que aún no es momento de abrir, ya que no se pueden anteponer las necesidades propias y las urgencias económicas a las de la salud de la población, a pesar de que reconoció que su situación económica ya es muy crítica, "nosotros seguimos pagando impuestos, nómina, servicios y demás como si el negocio estuviera abierto, como si todo estuviera normal, y en este momento puedo decir que nos estamos muriendo de hambre".
Sin embargo, dijo que de darse luz verde a la reapertura de los balnearios no se escatimará en la implementación de los protocolos sanitarios para salvaguardar la salud de los visitantes.
Por su parte, el comisariado ejidal de Cuautla y encargado de la administración del balneario ejidal El Almeal, Jesús Chavéz Ramírez, reconoció que ya están listos para reabrir estos espacios por lo que desde semanas atrás se han venido preparando para brindar la mayor seguridad a los visitantes, pues aseguro que su cierre desde principios del mes de abril le ha traído como consecuencia la perdidas de varios millones de pesos.
Aguantar hasta el último
La Asociación de Parques Acuáticos y Balnearios de Morelos (Apabam) cuenta con 32 balnearios adheridos, los cuales hasta el momento, permanecen activos, sin embargo el cierre definitivo de alguno de ellos podría darse dependiendo de la fecha que la autoridad establezca para la reapertura, "los recursos tienen un límite, es un riesgo que corren no sólo los balnearios sino todas las empresas".