Gastan miles de pesos en busca del milagro

Pseudociencia presume curar el Covid-19 y obtiene miles de pesos defraudando a los crédulos

Katy Cárdenas l El Sol de Cuernavaca

  · domingo 29 de noviembre de 2020

Por medio de un manejo impecable de mercadeo, logra que caigan en una realidad que puede ponerlos en peligro l Archivo

Las y los ciudadanos basados en la desesperación por encontrar una cura contra la Covid-19 siguen expuestos a la difusión de productos milagro que ofrece la pseudociencia, misma que, por medio de un manejo impecable de mercadeo, logra que caigan en una realidad que puede ponerlos en peligro de muerte; la presidenta de la Academia de Ciencias de Morelos e investigadora del Instituto de Biotecnología (IBT), de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Brenda Valderrama Blanco, enfatizó que los implicados en estos fraudes ponen en grave riesgo a la población con el único interés en una remuneración económica.

La pseudociencia (aquella afirmación, creencia o práctica que es presentada como científica y fáctico, pero es incompatible con el método científico) y quienes la ejercen lo hacen de manera cíclica, lo que hace parecer que no tiene un fin, sin embargo, la población que las adquiere no sólo pierde recursos económicos sino también la salud que se ve más mermada al consumir un medicamento falso.

“Se pierde dinero porque los productos son una estafa, un fraude, utilizan elementos que no tiene valor, que incluso valen centavos y los venden en miles de pesos en algo no le dará beneficio; segundo, pierden la oportunidad de protegerse porque dejan de hacer cosas útiles cuando salen de su casa sin cubrebocas y eso los pone en riesgo”, enfatizó.

Las faltas de confianza en las autoridades los hacen presa fácil de quien a través de la mercadotecnia, “que exacerba el producto con campañas creativas, que les da una narrativa que convenza sin tener que demostrar científicamente si es o no útil, vemos al Presidente Municipal de Francisco I. Madero, Coahuila, a la senadora, que promueven productos sin nada útil en el fondo y por eso los envuelven bonito, con moños y te los venden”.

En el mismo estado se han dado situaciones en donde políticos como el diputado José Casas impulsaba entre los alcaldes el uso de “una molécula para sanitizar que no servía, era un fraude, y situaciones así las vamos a ver resurgir por la falta de soluciones, la necesidad de tener salidas, es un ciclo que se repite cada cierto tiempo”.

¿Cuándo dudar?

“Todo producto que no tengan un registro o aval de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) es un fraude que se “viraliza” bajo argumentos como “cómpralo antes de que nos impidan promoverlo o venderlo”.

También “dudar cuando un producto te lo vendan como el que sirve para curar muchas enfermedades, que esté basado en testimonios y no información científica, cuando la principal herramienta sean videos; que no tengan ningún aval de una agencia regulatoria. Por más que nos sintamos identificados con algún testimonio, o que tanto queramos a la persona que nos lo está recomendado, debemos dudar”.

Estas campañas de marketing han logrado convencer tanto a personas con bajo nivel educativo hasta personas formadas profesionalmente, refiere, ya que en el caso del Dióxido de cloro sustancia del Hipoclorito de Sodio, cualquier persona que ha cursado la secundaria sabe que es tóxico para el ser humano, pero ante la desesperación este punto se antepone ante cualquier conocimiento previo”.

Las únicas medidas preventivas hasta el momento, enfatizó Valderrama Blanco, “es el uso de cubre bocas, evitar contacto con otras personas, es importante no estar en espacios cerrados, sobre todo cuando son personas fuera de nuestro circulo de vida, no más de 15 minutos”.